La discreta vida de Sofía, la hija menor de Ana Rodríguez y José Bono: estudios en Londres, viajes y 'likes' con Aitor Gómez

El pasado lunes 21 de abril la empresaria guatemalteca Ana Rodríguez Mosquera cumplió 67 espléndidos años, pero la que fue mujer de José Bono (74 años) lo celebró unos días después. En concreto, fue este pasado fin de semana cuando la también socióloga reunió en un restaurante de Madrid a parte de su familia.

Dio cita a sus tres hijas, Amelia (44), Ana (39) y Sofía Bono (21), a sus nietos y a su exyerno, Manuel Martos (46). Causaron baja, siempre según la agencia Europa Press, su único hijo varón, José Bono Rodríguez (41), y su exmarido. No obstante, pese a esto, la familia brindó y disfrutó de su mutua compañía. Son los Bono una saga unidísima.

Para Ana, cuenta a EL ESPAÑOL alguien muy próximo, no hay nada más importante en el mundo que sus hijos y sus nietos. Todo gira en torno a ellos y ellos la cuidan y miman en un período de su vida especial. De sus hijas, las que menos proyección pública han decidido tener -en la medida de lo posible- son Ana y Sofía. Ésta última es la menor y la más discreta.

Amelia Bono disfruta de unos días en la nieve junto a su hermano José y luce este mono ajustado de Oysho en color rojo

Sofía Bono, en una fotografía de sus redes sociales.

Sof, como la llama cariñosamente su entorno, nació en Chile y fue adoptada por José Bono y Ana Rodríguez en el año 2001, cuando ella tenía tan sólo siete meses. "Tanto Ana como yo cometimos un error enorme al pensar que íbamos a hacer un favor a la niña, porque es la niña la que te hace el favor a ti", le contó Bono a Bertín Osborne (70) en televisión.

Añadió entonces el que fue ministro de Defensa del Gobierno de España entre 2004 y 2006: "Es lo verdaderamente llamativo. La sangre es un cuento chino. Emocionalmente soy más rico desde que Sofía está con nosotros". Sofía, al igual que sus hermanos, es el gran orgullo de José y Ana. Es una joven "responsable", así la definen desde su entorno.

Y muy madura. Por esto mismo, no dudaron José Bono y Ana Rodríguez en dejarla volar cuando Sofía quiso estudiar Diseño de Interiores y Decoración en la Regent's University en Londres. Allí ha estado afincada la joven unos cuantos años, pero, tal y como ha podido confirmar este periódico, ya está de regreso y su ubicación actual es en Madrid.

Sof cursó sus estudios superiores, reza su LinkedIn, desde 2020 hasta 2024. Fue el año pasado cuando la hermana de Amelia Bono terminó de formarse en esa materia. Su sueño es poder dedicarse al diseño de interiores y se está empleando a fondo para ello. Sofía es una joven a la que le gusta el arte, la moda y también viajar.

De hecho, en sus redes sociales presume de sus escapadas. En su perfil de Instagram Sofía Bono atesora 24.600 seguidores. Hace un tiempo, EL ESPAÑOL se hizo eco del gran potencial de la joven como influencer desde que, tiempo atrás, decidió abrir su cuenta para que sus followers pudieran conocer de primera mano sus pasos, sus gustos y sus aficiones.

Sofía no sólo nutre de contenido su Instagram de momentos de su vida diaria, sino que también da tips de belleza, alimentación e incluso reels de humor. También aprovecha Sofía su plataforma en redes para dejar constancia de su amor por los animales. Además de sus mascotas, Sofía es una enamorada de los caballos.

Se cuenta desde su entorno que la hija menor de Ana Rodríguez ve las redes sociales como un pasatiempo, pero en ningún caso como una fuente de ingresos o modo de ganarse la vida: ella está centrada en su profesión. En el plano del amor, todo hace indicar que Sofía está soltera. Al menos, no habría alguien formal en su vida.

Fue en el año 2022, de acuerdo a los datos que controla EL ESPAÑOL, cuando su historia de amor con su última pareja conocida, Borja Gómez de Mendoza, tocó a su fin. Fue aquel un amor bonito. Sofía Bono y su ya expareja se conocieron porque tienen muchos amigos en común.

Sofía Bono, en una fotografía de sus redes sociales.

Él pertenece al círculo de amistades de Victoria Federica de Marichalar y Borbón (24) y de Froilán (26), a los que conoció estudiando Negocios y Comercio Internacional. Ambos vivieron un amor marcado por los viajes. Ella no dudó en trasladarse a vivir a República Dominicana, para estar al lado de él, que trabajaba entonces allí.

Hubo quien sostuvo que los entonces enamorados tenían vidas y gustos muy dispares. Los hobbies de él eran, sobre todo, la caza y el mundo del toro, además de ser muy devoto de la virgen de Nuestra Señora del Rocío.

En otro orden de cosas, Sofía mantiene una relación especialísima no sólo con sus padres, también con sus hermanos. A EL ESPAÑOL se informa que la unión de Sof con Amelia y su hermano José es muy estrecha, así como la complicidad. También libra una excelente relación Sofía con Aitor Gómez, expareja de su hermano José. Sofía y Aitor se intercambian likes en sus redes sociales y quedan siempre que pueden.

Amor y adopción

José Bono Martínez, abogado y político del Partido Socialista Obrero Español, se casó con la socióloga Ana María Rodríguez en 1980. Tres años más tarde, en 1983, Bono llegaba a la presidencia de Castilla-La Mancha.

Como presidente de todos los manchegos fue reelegido hasta en seis legislaturas, pero en 2004 dejó su labor como líder autonómico para tomar la cartera del ministerio de Defensa de España con José Luis Rodríguez Zapatero (64).

Fruto de su matrimonio con Ana Rodríguez nacieron tres hijos: Amelia, Ana y José. En el año 2001, José Bono y su entonces esposa, adoptaron a Sofía, una niña nacida en Chile que llegó al hogar de los Bono con tan solo siete meses y que llenó de alegría a sus padres y hermanos mayores.

En aquel entonces, Bono desveló que quería tomarse la paternidad de una forma distinta a como lo hizo con sus primeros vástagos: "La infancia de los tres mayores se me pasó volando", apuntó. En julio del año 2010, José Bono, que entonces era presidente del Congreso de los Diputados, anunció que se separaba de su esposa, Ana Rodríguez, tras 29 años de matrimonio.

El divorcio no fue una sorpresa para sus tres hijos mayores, pero sí que fue un doloroso trance para Sofía, la pequeña, que tan solo tenía 9 años cuando sus padres decidieron tomar rumbos distintos. Aunque las razones exactas de su ruptura no se hicieron públicas, se sabe que las exigencias de la vida política y las diferencias personales jugaron un papel importante.

Ambos lograron superar las tensiones y reconstruir una relación basada en el respeto y la amistad. Hoy en día, José Bono y Ana Rodríguez mantienen una excelente relación, demostrando que es posible priorizar el bienestar familiar incluso después de una separación. Ambos han sido vistos juntos en eventos familiares y sociales.