Crónicas Marcianas significa mucho para su presentador, Javier Sardá (65 años). Con este programa, que este pasado martes, 12 de diciembre, volvió a la televisión, el periodista no solo consiguió el éxito profesional. También encontró el amor. 

En julio de 2006, Javier Sardá se casó con Ana Gutiérrez, la peluquera del mencionado espacio. Según reseñaron los medios en aquel entonces, fue un enlace civil que se celebró en Barcelona en petit comité. Acudieron los amigos más íntimos de la pareja. Entre ellos, Tony Cruz y Josep María Mainar, de Gestmusic, la que fuera productora de Crónicas Marcianas. 

Entonces era poco lo que se sabía de su relación. Apenas su círculo más cercano conocía que ambos mantenían una historia de amor. La fecha en la que comenzaron a estar juntos no llegó a revelarse, pero el propio Sardá, en la última emisión de Crónicas Marcianas, hizo una especial mención a Ana. "Dedico el programa de esta noche a esta peluquera que destila misterio", dijo mientras aparecía en pantalla una imagen de la estilista.

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Javier Sardá, en la presentación de 'Crónicas Marcianas'. Gtres

También fueron testigos del 'sí, quiero' las hijas de ambos, fruto de sus relaciones anteriores. La estilista de Crónicas Marcianas ha sido madre dos veces, mientras que el periodista solo tiene una hija de su primera esposa, Rosa María Grau. 

Helena, la única hija de Sardá, ha seguido los pasos del presentador. Sin embargo, ha enfocado su carrera fuera de la pequeña pantalla. Estudió Ciencias Políticas, pero a día de hoy trabaja como periodista en Doha, Qatar. Desde hace cuatro años, según indica su cuenta de LinkedIn, es presentadora, reportera y productora de AJ+, la plataforma en castellano de la cadena árabe Al Jazeera.

Javier Sardá y Ana Gutiérrez, durante unas vacaciones en Ibiza. Gtres

Aunque siempre se ha mantenido en un discreto segundo plano, en noviembre de 2022 Helena se atrevió a pisar un plató para sorprender a su padre. Javier Sardá presentaba La gran confusión y, sin imaginarlo, recibió la visita de su hija que había volado desde Qatar. 

"Se nos hace raro estar juntos en un plató porque siempre hemos querido mantener mi identidad al margen", confesaba Helena. "Este último programa iba de la familia y yo, en estos últimos cuatro años, he tenido muchos momentos en la distancia y he dicho 'qué ocasión para decirte mi profunda admiración profesional y personal'", le expresaba la joven a su progenitor.

Aunque sus padres se separaron cuando ella apenas tenía tres años, en aquella aparición televisiva Helena dejaba claro que su relación con ambos siempre ha sido "fantástica". "He tenido muchos privilegios en la vida de los que soy muy consciente, uno de los mayores es tener una madre y un padre que me han hecho sentir siempre tan querida y tan comprendida. Creo que cuando la familia te da esto, te lo da todo", reflexionaba la hija de Javier Sardá. 

Un año antes, el periodista ya presumía públicamente de la joven presentadora. Lo hacía en su columna en El Periódico. Desvelando algunos detalles de su vida privada, de la que siempre ha sido muy celoso, Sardá escribía: "Mi hija Helena tiene 27 años y vive en Qatar. Estudió Políticas, aprendió francés en Quebec, ha estudiado árabe durante nueve años y está trabajando para Al Jazeera. Ella está en el mundo". 

Javier Sardá y su hija, Helena, en 'La gran confusión'. TVE

Dura infancia

En 2012, Javier Sardá escribió su autobiografía, repasando los recuerdos más duros de su infancia y juventud, desde los ocho hasta los 30 años. Tituló el texto como Mierda de infancia y relató su etapa con sus abuelos "falsos" para no conocer la enfermedad y muerte de su madre, sus años de universidad e incluso la muerte de su hermano, que falleció a causa del sida. 

El pasado 2020, Javier Sardá también perdió a su hermana, Rosa María, quien por muchos años ejerció el papel de madre y fue tan conocida como el periodista por su carrera en las tablas y en la pequeña pantalla. La actriz y presentadora murió a los 78 a causa de un cáncer.