Han pasado siete años desde que Mario Biondo fue hallado sin vida en su casa y, pese a todo tipo de pruebas, el tema sobre su presunto asesinato no cesa. Para la familia del cámara de televisión, su viuda, Raquel Sánchez Silva (47 años), sigue siendo sospechosa y por ello, según ha podido saber JALEOS, se ha formado un grupo para acosar a la presentadora de televisión en redes sociales.

Este medio ha podido conocer que el acoso hacia Raquel Sánchez Silva está siendo "horrible" y, en este sentido, su abogado ha presentado una denuncia para frenar todo tipo de amenazas. El objetivo de este grupo, según apuntan a JALEOS, no es descubrir más datos sobre la muerte de Mario Biondo, sino "destruir" a la periodista.

Pero Raquel no ha sido la única víctima de estas constantes amenazas. Sus amigos, sus familiares y hasta sus seguidores han recibido insultos por su cercanía con la exconcursante de MasterChef Celebirty, a quien tildan de sospechosa de la muerte del que fuera su marido. Esto, pese a que las tres autopsias realizadas al cuerpo del italiano han dictaminado que fue un suicidio. El fiscal de Palermo, además, ha pedido dos veces al juez que se cierre la investigación porque no hay ningún hecho delictivo. 

Raquel Sánchez Silva, junto a la madre y hermana de Mario Biondo, el día de su entierro. Gtres

Según ha podido saber este periódico, cada vez que sale una noticia de Raquel Sánchez Silva, este grupo destinado a "hacerle daño" se dedica a amenazarla en redes sociales. El acoso se extiende a sus más fieles seguidores, en caso de enviar un mensaje a favor de la presentadora. Sus followers también son insultados por "hablar de una asesina". También han arremetido contra los programas de televisión en los que aparece la periodista por contar con ella en sus formatos. 

No es la primera vez que Raquel acusa este tipo de situación. Aunque la reciente denuncia se ha hecho después de una ola de críticas recibidas tras la presentación de una edición especial del programa Le Iene (Las hienas), titulada Mario Biondo: un suicidio inexplicable y emitido por Italia 1, de Mediaset, las amenazas a la presentadora vienen desde hace tiempo atrás. 

Raquel Sánchez Silva y Mario Biondo, en una imagen de archivo. Gtres

Hace poco más de un año este medio pudo conocer que la presentadora presentó una querella por acoso, injurias, calumnias y amenazas. Entonces la comunicadora recibía comentarios como "Ten cuidado dónde andas... Mírate siempre atrás, cariñito", "quien mata, paga... prepárate", "¿a quién pagaste para matar a nuestro Mario? te queda menos, asquerosa" o "tus amistades fuertes nos las pasamos por el forro... la justicia está llegando, marrana". Todos, desde perfiles falsos en redes sociales.

Un año antes, se veía envuelta en un asunto similar y la Sección nº 30 de la Audiencia Provincial de Madrid sancionaba a los padres y hermana de Mario Biondo, Giuseppe Biondo, Santa D'Alessandro y Emanuela, por una falta de vejaciones injustas contra Raquel Sánchez Silva, publicadas en Twitter y Facebook. Entonces se les condenaba a pagar 3.000 euros a la presentadora por daños morales y a cumplir una pena de ocho días de "localización permanente cada uno de ellos". Pero esto no fue suficiente. Al margen de una tercera autopsia que confirma que el cámara se quitó la vida y de las peticiones del juez de Palermo, los insultos y las amenazas han continuado y la presentadora se ha visto obligada, una vez más, a hacer frente a esta situación.

La muerte de Biondo

Mario Biondo falleció alrededor de las seis de la madrugada del 30 de mayo de 2013 en la vivienda que compartía con su mujer, mientras se encontraba solo. Desde entonces, el caso ha mantenido en vilo a España y a Italia por las circunstancias de su muerte y por la constante lucha de su familia por descubrir más detalles del fatídico suceso. 

El cámara italiano apareció muerto en su casa, colgado de una estantería. Tras varias especulaciones sobre los motivos de su fallecimiento, las tres autopsias han determinado que se suicidó. Sin embargo, su familia sigue insitiendo que no y siete años después continúan apuntando que se trató de un asesinato en el que, en su opinión, estuvo implicada su mujer, quien a día de hoy es víctima de acoso en redes sociales. 

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