• 1 de 7

    Ya sea habitación, suite o riad, cada una de las estancias están decoradas con artesanía local y decoración tradicional arábigo-andaluza.

  • 2 de 7

    Maderas, cueros, mosaicos y escayolas cinceladas adornan también los originales cuartos de baño.

  • 3 de 7

    Las piscinas del hotel son míticas. Entre palmeras y olivos hay además dos pistas de tenis de tierra batida, petanca, ping pong y gimnasio.

  • 4 de 7

    El hotel tiene 27 fuentes en total y unos cuantos estanques, además de una interesante colección de fotografías contemporáneas.

  • 5 de 7

    Las ocho hectáreas de jardines comprenden seis especies de palmeras, 200 olivos (algunos de más de 700 años), 700 naranjos, tres pequeños jardines temáticos, 21 especies de cactus y 5.000 rosales, además de un pequeño huerto y plantas aromáticas.

  • 6 de 7

    El lugar fue un regalo de bodas del rey Sidi Mophamed Ben Abdallah a su hijo Mamoun, de ahí su nombre.

  • 7 de 7

    El hotel cuenta también con Hammam, barbería tradicional y salas de tratamiento individuales. La piscina cubierta es uno de sus must con sus mosaicos en forma de escamas azul y plata.