El director artístico de Balmain, Olivier Rousteing (37 años), será el diseñador invitado de la nueva colección de Alta Costura de Jean Paul Gaultier (69). El francés Rousteing ha anunciado en sus redes sociales "lo feliz y orgulloso" que se siente por diseñar esta colección que verá la luz el próximo mes de julio durante la semana de la Alta Costura de París.

"Eres una de mis mayores inspiraciones. Gracias por haberme elegido para ser el próximo diseñador invitado para el desfile de Alta Costura de julio. Es un honor. ¡Qué ganas tengo de mostrar a todo el mundo lo que estamos preparando! Te quiero", escribió Rousteing como pie de una foto en la que aparece con Gaultier.

El diseñador ha compartido algunas imágenes en su cuenta de Instagram tomadas en el taller de Jean Paul Gaultier en París, donde dice que está "aprendiendo tanto como puede".

Rousteing se encarga desde 2011 de la dirección artística de Balmain, donde ingresó en 2009 tras haber sido diseñador en la marca Roberto Cavalli. Fue a la temprana edad de 25 años cuando Olivier Rousteing tomó el relevo de Christophe Decarnin en el puesto de director artístico de la casa Balmain.

En sus redes, donde cuenta con cerca de ocho millones de seguidores, muestra trabajos que ha realizado para celebridades de la talla de Kim Kardashian (41), la actriz Zendaya (25), la cantante Jennifer López (52) o el rapero Lil Nas X (22), entre otros.

Considerado uno de los mayores talentos globales por su incansable labor frente a la firma donde ya lleva más de una década, Olivier Rousteing no ha tenido una vida nada fácil.

En un documental que aún hoy se puede ver en Netflix, Olivier Rousteing, el huérfano prodigio, se muestra el día a día del francés afincado en París tras vivir en Burdeos, ciudad en la que se instaló con una familia que lo adoptó cuando tenía sólo un año.

En el reportaje, que tiene una duración de casi una hora y media, se observa el día a día de la cabeza pensante de una de las marcas más de moda y lujo más relevantes del mundo. Además, también se ve una parcela mucho más vulnerable, pues Rousteing lleva años de burocracia para intentar encontrar sus orígenes y a su madre biológica. 

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