El estampado de vichy ha calado tan hondo esta primavera-verano que no es raro acumular varias prendas con este diseño. Una falda con cuadros más grandes, un pantalón con el motivo más pequeño, el clásico blanco y negro, su versión en colores pastel, ¿quién puede resistirse ante tanta oferta?

Esta absoluta hegemonía del vichy, sin embargo, y aunque pocas se atrevan a reconocerlo, puede llegar a cansar ligeramente. Pero en la industria de la moda se encuentra solución para todo y aquellas que ya se hayan 'pasado el nivel' de los cuadros más clásicos, pueden experimentar con otros tipos que ya están instalados en los armarios y en los perfiles de Instagram más fashion.

Amelia Bono, en una de sus publicaciones de Instagram. Redes sociales

Amelia Bono (40 años) ha sido una de las expertas en crear tendencia que se ha desmarcado del vichy este verano. Lo ha hecho apostando por un conjunto de estampado de cuadros dameros. Se trata de un conjunto de punto, compuesto de un top con escote de pico remarcado por unas gruesas líneas que lo bordean y un short a conjunto, cuyo bajo también incorpora las mismas demarcaciones que la parte superior.

En el caso de la hija del exministro José Bono  (70) se trata de un estampado de cuadros igual que discreto que el vichy pero de un tamaño algo superior. El conjunto de Amelia, además, juega con tres colores, en vez de dos, que suele ser lo habitual en el estampado rey de esta temporada.

Siguiendo en el espectro más clásico de las tendencias, el auge de los pañuelos les ha servido a las marcas para experimentar con sus estampados. Algunos de ellos también dibujan este estampado geométrico, tal y como ha demostrado Sara Baceiredo (22), que ha lucido un vestido de Insomnia Studio, con cuadros turquesas sobre un fondo azul oscuro.

Sara Baceiredo, Nagore Robles y Dulceida, interpretando la tendencia de los cuadros. Redes sociales

La propuesta de Nagore Robles (38) es para quien se atreva con una versión mucho más arriesgada. Dejando a un lado el clasicismo más tradicional, la presentadora vasca se embarca en una interpretación de los cuadros que surge, se da a entender, casualmente cuando se aplica la técnica del tie-dye. El vestido de la comunicadora, en concreto es de la tienda burgalesa Fallin Love.

En la misma línea, Dulceida (32) apuesta por crear falsos cuadros de una forma muy original. A principios de verano lució una sudadera de la firma Nomonorm que construía los cuadros cruzando palabras escritas en blanco sobre un fondo negro.

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