En la mañana de este martes, día 29 de marzo, Londres ha acogido el servicio religioso en memoria de Felipe de Edimburgo, fallecido en abril del año pasado. A las 10:30 -hora local- la abadía de Westminster se ha erigido como el escenario donde se han reunido más de 500 personas, entre familiares, miembros de otras casas reales, amigos y la viuda, la reina Isabel II (95 años).

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    La princesa Beatriz, junto a su hijo, el rey Guillermo y la esposa de éste, Máxima de Holanda

    Londres se ha engalanado este martes, día 29 de marzo, para recordar a una figura clave en la historia del Reino Unido. En la emblemática Abadía de Westminster se ha celebrado un servicio religioso en memoria del duque de Edimburgo, el marido de la reina Isabel II, que falleció en el Castillo de Windsor el 9 de abril del año pasado.

    Hasta la capital inglesa se han desplazado miembros de todas las casas reales europeas para acompañar a la soberana, que hasta la mañana de este martes no había confirmado su asistencia por sus problemas de salud.

    A las 10:30, hora local, empezaban a llegar los invitados. De los primeros en hacer acto de presencia, la princesa Beatriz, antes reina de Holanda, junto a su hijo Guillermo y la esposa de éste, Máxima Zorreguieta.

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    El príncipe Alberto de Mónaco

    El jefe del estado monegasco, el príncipe Alberto II, ha sido otro de los primeros invitados en llegar hasta el templo religioso. No resulta llamativo verlo solo en Londres, pues su esposa, la princesa Charlène, aún se encuentra recuperándose de sus dolencias "físicas y psíquicas" tras varias operaciones por la infección que contrajo en Sudáfrica en mayo del año pasado.

    Tras pasar varios meses en una clínica en Suiza, Charlène ha regresado al Palais Princier de Mónaco pero no ha recuperado aún su agenda de actos. De ahí su ausencia en Reino Unido este martes.

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    Los reyes Felipe y Letizia

    Felipe VI y Letizia tampoco han querido faltar al emotivo homenaje en recuerdo a la memoria del duque de Edimburgo. A través de su cuenta de Twitter, la Casa Real española ha rememorado "en honor a las inolvidables ocasiones compartidas, los Reyes asistirán a la misa de Acción de Gracias por su vida y trabajo".

    A juicio de los Reyes, el príncipe Felipe de Edimburgo "dejó el pasado año un legado de servicio y dedicación a la Corona y al Reino Unido". Para la ocasión, la reina Letizia ha lucido un atuendo sobrio en verde botella con sombrero, como marca el protocolo británico. 

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    Los reyes Felipe y Matilde de Bélgica

    La ceremonia, a la que también han asistido los reyes Felipe y Matilde de Bélgica, ha rendido homenaje "en particular a la contribución del duque de Edimburgo a la vida pública y su firme apoyo a más de 700 organizaciones benéficas", que también han estado representadas en el acto.

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    Los reyes Gustavo y Silvia de Suecia

    Con atuendo oscuro y con sombrero para ellas, como marca el protocolo británico en estos casos, han aparecido los reyes Gustavo y Silvia de Suecia. Los soberanos suecos, a sus 76 y 68 años, respectivamente, superaron la Covid-19 hace apenas unas semanas. Los miembros de las distintas casas reales de Europa, han ido tomando asiento de manera escalonada antes de arrancar el servicio por el príncipe Felipe, cuyo funeral, el 16 de abril de 2021, estuvo marcado por fuertes restricciones sociales por la pandemia.

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    La princesa Beatriz y Edoardo Mapelli

    Las dos únicas hijas del príncipe Andrés, las princesas Beatriz y Eugenia de York, han sido los primeras nietas de la reina Isabel II en acceder al templo londinense. Ambas han ido acompañadas de sus respectivos esposos, el italiano Edoardo Mapelli y el empresario del vino Jack Brooksbank. Llama la atención la ausencia de su madre, Sarah Ferguson, aunque en realidad nunca se confirmó que fuera a acudir. 

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    El príncipe Eduardo y su esposa, Lady Louise Windsor

    El príncipe Eduardo, el menor de los cuatro hijos que Isabel II tuvo con Felipe de Edimburgo, y que ocupa actualmente el puesto 14º en la línea de sucesión al trono, ha asistido a la misa en recuerdo a su padre con la compañía de su esposa, Lady Louise Windsor, condesa de Wessex. Justo detrás, sus dos hijos, Luisa y Jacobo Mountbatten-Windsor.

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    La princesa Ana, hija de la reina Isabel II y el duque de Edimburgo

    La princesa Ana, la única hija que el duque de Edimburgo tuvo con la reina Isabel II, ha llegado sola, unos instantes antes que su hermano mayor, Carlos, el heredero de la Corona británica. La hija de la monarca ha seleccionado un atuendo en color verde, coincidiendo en tono, casualmente, con su cuñada, la duquesa de Cornualles y con la reina Letizia. Con gesto serio y paso firme, Ana accedía a la Iglesia de San Pedro de Wesminster -la Abadía- para recordar a su difunto padre. 

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    El príncipe Carlos y la duquesa de Cornualles

    Carlos de Inglaterra, príncipe de Gales, ha asistido junto a su esposa, Camilla de Cornualles. El pasado mes de febrero, Isabel II expresó en un comunicado el deseo de que su nuera, la duquesa de Cornualles, se convirtiera en reina consorte de todos los británicos llegado el momento. El príncipe de Gales ha elegido un elegante traje de chaqueta azul con raya diplomática, camisa y corbata, mientras que su esposa ha seleccionado un vestido de terciopelo verde esmeralda, a juego con su tocado.

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    El príncipe Guillermo, Kate Middleton y los príncipes George y Charlotte

    Los duques de Cambridge han sido los últimos miembros de la Familia Real británica en acceder a la Abadía de Westminster antes de que lo hiciera la Reina. Lo han hecho de la mano de sus dos hijos mayores, los príncipes George y Charlotte. No ha asistido, en cambio, el pequeño de la casa, el príncipe Louis, que el próximo mes de abril cumplirá cuatro años. Para esta ocasión, Kate Middleton ha lucido un vestido en color negro con estampado de pequeños lunares en blanco, de manga larga, corte midi y sombrero con lazada en beige. 

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    Isabel II y su hijo, el príncipe Andrés

    La reina Isabel II ha llegado junto a su hijo, el príncipe Andrés de Inglaterra, quien se ha dejado ver en público por primera vez desde que alcanzara el pasado febrero un acuerdo extrajudicial con la mujer que lo denunció por abuso sexual cuando ella era menor de edad. Andrés, a quien la Reina retiró el título de York, los títulos militares y los patricinios que ostentaba, tomó asiento en una hilera frontal de la Abadía, junto con sus otros hermanos, Carlos, Ana y Eduardo.

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    Más de 500 invitados

    El servicio, al que han asistido más de 500 invitados, ha agradecido la dedicación del consorte de la Reina "a la familia, la nación y la Commonwealth" y ha reconocido "la importancia de su legado en la creación de oportunidades para los jóvenes, la promoción de la protección y conservación del medio ambiente y el apoyo a las Fuerzas Armadas".