El pistoletazo a la temporada de piscina está cada vez más próximo. El aumento gradual de las temperaturas provoca que los pensamientos comiencen a centrarse en esas larga jornadas en la que los chapuzones se convierten en fuente de refresco y diversión. Pero también de estilismo y es que la moda de baño tiene cada vez más peso. No solo en la femenina, donde los bikinis prometen ser los reyes de la temporada estival, también en la masculina.

Los estampados y los colores vivos van a ser las dos grandes tendencias, tal y como muestra la nueva colección de la firma Scotta 1985. Una colección que no solo derrocha estilo, pues también está enfocada en la preservación del medioambiente. La nueva colección beachwear de la firma está realizada en materiales reciclados provenientes de botellas de plástico y te la podrás comprar con la tarjeta regalo de bienvenida de Scotta 1985 que recibirás al suscribirte a EL ESPAÑOL.

Estos modelos son, de hecho, las grandes estrellas de la temporada. La marca apuesta una vez más por la técnica del upcycling y crea una línea sostenible de bañadores realizados a partir de envases reciclados. Esta materia prima permite a la firma minimizar el consumo de recursos naturales, transformando la fibra obtenida a partir del reciclaje del plástico en materiales de gran calidad. Una filosofía con la que se consigue reducir la contaminación de las prendas, apostando por la economía circular. El resultado no podía ser mejor, bañadores de tejidos ligeros y mejorados técnicamente que proporcionan una suavidad natural y garantizan la máxima durabilidad.

Los nuevos bañadores de Scotta 1985 están fabricados con materiales reciclados. Scotta 1985

La sostenibilidad de la colección se reafirma en el proceso productivo. La confección de los bañadores se realiza siguiendo un minucioso proceso de reciclado mecánico, el procedimiento de manufactura más sostenible en términos de menor consumo energético y emisiones de CO2. Para Carlos Serra, CEO y fundador de la compañía, la utilización de estos nuevos métodos surge por las propias necesidades de avanzar: "siempre hemos apostado por una moda que busque la durabilidad y la calidad, ante todo. Este proyecto que estamos desarrollando es un paso más hacia una moda comprometida con el planeta".

Esta nueva línea de bañadores no solo es eco, también abraza algunas de las tendencias claves de la temporada. Sus colores son el azul, el rojo y el verde -en diferentes tonalidades-, que se mezclan con estampados divertidos y veraniegos. Algunos de los diseños, de hecho, recuerdan al mar, donde nacieron los diseños. En cuanto al precio, todos los trajes de baños cuestan lo mismo, 65 euros. 

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