Llegar a la sección de yogures de los supermercados de España, sea la cadena que sea, no es tarea fácil. O coges tu yogur de siempre, el que llevamos comprando desde que nos fuimos a vivir solos o podemos tirarnos más de tres horas mirando yogures sin parar, sin saber muy bien al final, cuál o cuáles escoger.

Pero como siempre, al final todo resulta más sencillo de lo que parece. Sí, también con los yogures bífidus. Porque, ¿son realmente mejores que los demás? ¿O sólo es que tienen más fama?

Como sabemos, para escoger un buen yogur hace falta mirar el listado de ingredientes que también cumple la regla de oro de todos los etiquetados: cuantos menos ingredientes, mejor. De hecho, en cuestiones de yogur, tan solo deben tener dos ingredientes: leche y fermentos lácticos. Ni más ni menos. En ocasiones, también pueden llevar leche en polvo o nata. Pero nada más. Todo lo demás serían florituras y añadidos que no aportan nada nutricionalmente hablando.

El mejor , el más simple

El único yogur que realmente tiene beneficios en nuestra microbiota intestinal es “el yogur natural de toda la vida. Un yogur que no lleva azúcar, ni edulcorantes ni nada”, tal y como afirmaba a EL ESPAÑOL la nutricionista Andrea Calderón, secretaria científica de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación.

Que además suelen ser los más baratos en todos los supermercados. De este modo, los mejores yogures que podemos comprar son los yogures naturales sin azúcar (enteros o desnatados), y también los yogures griegos (que suelen ser más espesos) siempre que sean naturales y sin azúcar.

Recordemos que la grasa del yogur es una grasa saludable, que tiene beneficios para la salud y que por ello, podemos tomar yogures enteros sin que sea malo. Además, y como apunta la nutricionista Blanca Garcia-Orea en su cuenta de Instagram: “Si quieres adelgazar, es el mejor momento para priorizar grasas buenas (como las del yogur) para saciarte más y tener más energía con menos menos kcal, porque comes menos al saciarte antes”.

Los yogures de sabores como hemos venido explicando en EL ESPAÑOL se componen de edulcorantes para que le den dulzor, y de colorantes para que le den color. Lo último que llevan es fruta y si la llevan es en un porcentaje mínimo. Incluso los yogures 0% grasa tampoco serían recomendables porque pueden contener casi un 8% de azúcar y además, porque también la vitamina D necesita las grasas del yogur para que pueda absorberse.

Otra alternativa para escoger un buen yogur es seguir la regla del 3-4-3 que explica la divulgadora Marián García (Boticaria García) en El jamón de York no existe (La Esfera de los Libros, 2019). Esto es, un buen yogur debe contener más o menos un 3% de grasa, un 4% de hidratos de carbono y un 3% de proteínas. Pero entonces, ¿qué pasa con los yogures bífidos? ¿Son mejores que los demás? ¿Por qué tienen tanta fama?

Recomendable, pero no mejor

Lo cierto es que como dice el refrán, cría fama y échate a dormir. Al menos eso afirman los nutricionistas y expertos en nutrición. Los yogures bífidus son buenos y recomendables, siempre que sean naturales y sin azúcar, porque tienen bacterias buenas, pero no les hace mejores que los yogures naturales de siempre.

Así lo afirma la nutricionista María Merino: “Los yogures naturales bífidus también son recomendables pero que sea bífidus no lo hace mejor que uno natural y, además, a veces es más caro”. O el nutricionista Carlos Ríos impulsor del movimiento RealFooding: “Los yogures con bifidus se venden como productos beneficiosos para la flora intestinal, pero esto aún no se ha podido demostrar”.

De hecho, los yogures bífidus no serían propiamente un yogur. Según explica tambie´n Boticaria García en su blog los yogures para poder llamarse así, tienen que estar fermentados por un tipo concreto de bacterias (streptococcus thermophilus y lactobacillus bulgaricus), mientras que los yogures con bífidus estarían fermentados por otra bacteria como es la llamada bifidobacterias. “Hasta la fecha, los yogures con bífidus, no han demostrado ofrecer más beneficios que un yogur normal. Ni por supuesto, que ‘suban las defensas’”, escribe esta experta.

Ambos tipos de yogures (yogur bífidus natural y yogur natural) contienen bacterias buenas y beneciosas para nuestra salud, por lo que elegir uno y otro tendría los mismos beneficios para la población sana.

Es importante recalcar que el consumo de yogures sanos es muy beneficioso dentro de una alimentación sana, pero que en ningún momento puede sustituir al consumo de fruta, tal y como aconsejó el catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Navarra, Miguel Ángel Martínez-González.

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