El bodeguero Ramón Ramos ha fallecido este ayer a los 80 años de edad. Su familia, amigos y vecinos de Venialbo lloran la muerte del fundador de la bodega que llevaba su mismo nombre, y que era ejemplo de la elaboración tradicional de los caldos en la D.O. Toro. 

Desde 1963, Ramón Ramos ha trabajado por y para el mundo del vino en la provincia. Una ardua tarea que le ha granjeado un nombre más que destacado entre los bodegueros de Zamora, y una marca estrella, que ahora perpetúan sus tres hijos. De hecho, su antigua bodega fue reconvertida en museo y recientemente la familia estrenaba nuevas instalaciones en su pueblo natal, pero que mantenía el carácter tradicional en el proceso de elaboración de sus vinos.