El Ayuntamiento de Toro adquiere la totalidad de la propiedad del Teatro Latorre Ayuntamiento de Toro
El Ayuntamiento de Toro adquiere la totalidad de la propiedad del Teatro Latorre
La alcaldesa, Ángeles Medina, firmó la semana pasada la escritura de compra-venta del inmueble con Fundos, zanjando un asunto que empezó a fraguarse en el año 2015.
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El Teatro Latorre de Toro es desde esta semana propiedad "de todos los toresanos y toresanas", habiéndose formalizado la compra del inmueble entre el Ayuntamiento de Toro y Fundos, copropietaria de mismo hasta la actualidad, según informa el propio Consistorio toresano.
Concluye así un periplo que se inició en noviembre de 2015, tras realizarse las comprobaciones sobre la propiedad del Teatro Latorre, que se había comprado entre el Ayuntamiento de Toro y la Caja de Ahorros Provincial de Zamora el 25 de mayo de 1985, a su anterior propietario.
Ante "esta maravillosa noticia, es obligatorio hacer un poco de memoria sobre el Teatro Latorre y su historia", apunta el comunicado. El inmueble fue construido en la primera mitad del siglo XIX, sobre el solar del Convento de San Francisco, desaparecido a raíz de la desamortización de Mendizábal.
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Promovido a expensas del Hospital General de Nuestra Señora de las Angustias, entidad benéfica que pretendió con su construcción obtener ingresos para el funcionamiento del hospital. Es una excepcional muestra de la arquitectura popular de dicha época y fue inaugurado en el año 1846, dándole el nombre del famosísimo actor toresano Carlos Latorre.
Salvado in extremis de la demolición, en buena parte gracias a la labor de José Navarro Talegón, en 1985 se acuerda la compra del inmueble por parte del Ayuntamiento de Toro y la Caja de Ahorros Provincial de Zamora, por 18 millones de las antiguas pesetas, aportando 9 el Ayuntamiento y 9 la Caja. El Teatro es rehabilitado y comienza su etapa como lugar municipal para la cultura y el ocio que conocemos hoy en día.
En 2015, y pasados 30 años de su adquisición, el estado del Teatro fue envejeciendo y el Ayuntamiento en la búsqueda de subvenciones para su rehabilitación, se encuentra que muchas de ellas tienen como condición que el inmueble sea propiedad municipal en su totalidad.
Es ahí cuando empiezan las indagaciones para intentar que pase a manos municipales. En esos momentos la Caja de Ahorros Provincial de Zamora no existía, y su sucesora se encontraba en pleno proceso de fusión con otras entidades, siendo entonces la entidad Caja España-Duero, del grupo Unicaja.
El inmueble había ido pasando de manos en manos de las Fundaciones de dichas entidades Bancarias hasta caer en manos de la extinta Fundación España-Duero, con sede inicialmente en Salamanca. Varias reuniones con los responsables de la entidad para llegar a un acuerdo, que se consideraba tenía la obligación de ser muy ventajoso para el Ayuntamiento, debido a que había sido el único sustento del inmueble durante 30 años.
La situación se bloquea debido a las elevadas pretensiones de España-Duero y a pesar del apoyo que el Ayuntamiento recaba de otras administraciones, y es en 2019 cuando, con la desaparición de España-Duero y la creación de Fundos, Fundación Obra Social Castilla y León, el asunto puede seguir avanzando. Varios años de buscar la fórmula adecuada para el traspaso, finalmente se acuerda la compra-venta por un valor aproximado de 168.000 euros, que serán abonados por al Ayuntamiento de Toro a lo largo de diez años.
Se cumple con esta compra un deseo de la Corporación Municipal iniciado en 2015 por Tomás del Bien como alcalde, y que pone en manos de todos los vecinos de la ciudad la propiedad de nuestro insigne Teatro Latorre. Ahora, se iniciarán las conversaciones con otras administraciones para la restauración del inmueble, BIC desde el año 2008, y la actualización de la dotación técnica del espacio escénico.
Desde el Ayuntamiento de Toro queremos a gradecer a todas las personas que, ayer y hoy, han puesto su dedicación para la consecución de este objetivo. Ayer, notables toresanos como José Navarro, artífice de su puesta en valor y no demolición, Alejandro “Jalo” Sevillano, que fuera Director General de Arquitectura de la Junta, y que logró los fondos para su restauración en 1987 y a la Corporación Municipal de 1985 con Ignacio Ortiz como alcalde, por iniciar la compra en 1985.
Como no, a Tomás del Bien u su corporación, por el empeño puesto desde 2015 para la compra de la totalidad. También a los actuales responsables de FUNDOS, especialmente a su director general José María Viejo, su director general adjunto, Ignacio Galarraga, y su presidente Jorge Luis García Vázquez.
"Desde luego, es una noticia extraordinaria para la ciudad de Toro y para su futuro", finaliza el comunicado del Ayuntamiento toresano.
