El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha prometido que el Gobierno Autonómico "pondrá todos los medios a su alcance" para lograr la recuperación medioambiental, económica y social de los territorios de la Sierra de la Culebra afectados por el descontrolado incendio, que ha provocado ya la quema de 9.000 hectáreas de terreno, según fuentes oficiales.

Mañueco se desplazaba este mediodía a Sarracín de Aliste, para conocer de primera mano los trabajos de extinción que desde el pasado miércoles efectúan los equipos de la Junta de Castilla y León, el Gobierno de España, el Consorcio Provincial de Bomberos, y varias comunidades vecinas como Madrid, Extremadura, Galicia o Castilla-La Mancha. 

El presidente de la Junta ha mantenido un encuentro con el director general, José Ángel Arranz, y el resto del equipo de control que coordina las tareas de extinción. Y tras esta reunión, Mañueco ha explicado que lo sucedido con el incendio de la Sierra de la Culebra "ha sido una situación excepcional, se han producido unas condiciones climáticas, probablemente, únicas en las últimas décadas". La conjunción de vientos de más de 40 kilómetros por hora, temperaturas en torno a los 40 grados y la ausencia de humedad, "han dado unas circunstancias excepcionalísimas, que han provocado esta situación". 

El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, junto al consejero de Agricultura y Medioambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones; y el vicepresidente de la Diputación de Zamora, José María Barrios

Una climatología que no tiene vistas de mejorar en las próximas horas, ya que la previsión es que los vientos puedan alcanzar los 70 kilómetros por hora en la zona. El presidente informó también de que, se está haciendo un contrafuego, "quemar hectáreas para evitar la propagación del propio incendio"

Pese a eso, el presidente de la Junta se ha mostrado optimista y ha querido enviar un mensaje "de esperanza". Mañueco apuesta por "luchar todos unidos contra el fuego", y confía en que "estamos en las mejores manos, que son las de los técnicos de la Junta, y el resto de administraciones públicas que colaboran en el incendio".

También para todos esos efectivos ha enviado un mensaje de "cariño, aliento y solidaridad" por estar trabajando "a brazo partido" en el operativo. Igualmente, quiso tener unas palabras de aliento para los vecinos afectados por esta situación, de los que aseguró que "entendemos que esto es muy duro y nos preocupamos por las personas de esta zona". 

Adelantar la campaña

Respecto a la posibilidad de adelantar la campaña contra incendios, el número uno del Ejecutivo autonómico recalcó que las decisiones, en ese sentido, se basan en criterios técnicos. "Estamos a lo que digan los técnicos y aquí están los equipos que los técnicos determinan, valorando cada situación. La lucha contra el incendio de hoy no es un problema de medios, sino de condiciones climatológicas y de la orografía del terreno. Esa naturaleza que tenemos, tan agreste y bonita, complica la situación", expuso.

"En estos momentos, aparte de los datos, lo importante es la lucha contra el fuego. Más allá de cuántas hectáreas son, si son cinco, siete o nueve mil hectáreas, lo importante es apagar cuanto antes el fuego, proteger la vida y la salud de las personas, por lo que se han hecho evacuaciones preventivas en varios municipios y en algunas residencias del entorno y estamos trabajando en el día después del incendio", subrayó.

Por último, Fernández Mañueco recordó que, hace diez meses, se produjo un incendio "de similares características" en Gredos. "Hoy, en Gredos, las cosas se ven de otra manera. Ese es el mensaje que hay que trasladar. La Junta de Castilla y León va a responder como hemos hecho en el pasado. Ya hablaremos de las ayudas. Que todo el mundo esté tranquilo", concluyó.

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