David Sala Coll, consejero delegado de Audens Group, grupo empresarial al que pertenece la empresa zamorana Freigel, ha recibido esta tarde en el Consejo Consultivo de Castilla y León ubicado en la Plaza de la Catedral de Zamora el premio de empresario del año que entrega CEOE Cepyme.

En el acto ha estado presente el alcalde de Zamora, Francisco Guarido, la presidenta de la Diputación, Mayte Martín Pozo, el subdelegado del Gobierno, ángel Blanco y el presidente de CECALE, Santiago Aparicio, así como otros representantes de la sociedad institucional y civil de la provincia.

El presidente de la CEOE, José María Esbec, ha resaltado que es un premio “a una empresa que realmente lo merece”, con un gran futuro inmediato, crecimiento e inversiones fuertes, la última de 15 millones de euros y que continúa creando puestos de trabajo. En definitiva, “un modelo de empresa fantástica por lo que aporta a nuestra sociedad”.

Por su parte, David Sala se ha mostrado orgulloso de recibir el premio señalando que “me lo dan a mí, pero un empresario es lo que es por su gente, necesitas a gente a tu lado que proyecte todo eso” y recordando que la empresa “cree” mucho en Zamora, “es un potencial impresionante para el grupo”.

En este sentido, Sala ha hecho un recorrido desde los inicios de Audens Group en 1975, admitiendo que siempre vieron a Freigel como competencia hasta que en 2010 la compraron siendo “una empresa con productos muy interesantes, con más recorrido del que esperábamos”, con una plantilla preparada que conocía el producto y que han ido orientando más a materias primas del país y sobre todo a productos cárnicos, principalmente pollo.

David Sala ha incidido en que el grupo tiene siete plantas en España entre las cuales hay tres “potaaviones”, las plantas más grandes, dos en Barcelona y una en Zamora que cuenta con una de las líneas más modernas de Europa y donde ven “un futuro impresionante” con un volumen de negocio de entre 35 y 40 millones de euros anuales.

La planta de Freigel en Roales del Pan tiene genera unos 250 puestos de trabajo directos, pero también muchos indirectos como en el matadero de Galocha e Benavente, que cuenta con unos 100 empleados y matan casi 10.000 pollos diarios para la empresa.