La Junta de Castilla y León se encuentra a la espera de saber si el Estado permite a la administración autónoma retornar a la jornada laboral de 35 horas semanales, después de que el pasado año llegara a un acuerdo, junto a los sindicatos más representativos de la Comunidad, para reclamar conjuntamente al Gobierno de España la recuperación de la jornada laboral para los funcionarios de 35 horas semanales frente a las 37,6 horas ahora establecidas a raíz de la crisis.

Según ha explicado hoy en Zamora la viceconsejera de Función Pública y Gobierno Abierto, Marta López, el gobierno autonómico aún no ha calculado el impacto económico que esta decisión tendría sobre las arcas públicas, si bien cree que será mayor en el área sanitaria.

No obstante, y al margen del asunto de la jornada, López se ha comprometido con los sindicatos a cubrir el 100% de las plazas de reposición que el Estado permita convocar para este año. En 2016, se levantó la limitación en Sanidad y Educación, donde ya se permite cubrir el 100% de las jubilaciónes, mientras en el resto de consejerías solo es posible, de momento, cubrir la mitad.

De forma paralela, la Junta está llevando a cabo la reforma de la Administración Pública, que conlleva la modernización y reestructuración de sus estructuras centrales y periféricas. En el total de Castilla y León, la medida afectará a 84.000 empleados publicos, incluyendo Sanidad y Educación, 7.400 en Zamora.