Si algo tiene la edición 2019 de este Dakar es que cada etapa es más complicada que la anterior. Quizás tenga algo ver el formato utilizado este año, en el que se vuelve a pasar por zonas ya recorridas con diferentes waypoints. Las rodadas de la jornada se confunden con las del paso en días anteriores y provoca que los pilotos se confundan aumentando el riesgo de accidentes.

La antepenúltima etapa del Dakar no iba a ser nada fácil. La salida de la etapa estaba situada en San Juan de Marcona y contaba con la presencia de niebla en buena parte del recorrido. El Promyges Rally Team comenzaba la jornada marcando buenos tiempos en los pasos de control. Poco antes de llegar a la parte media de etapa, donde había una zona neutralizada, comenzaron los problemas. A las ya habituales roturas de correa se les sumó la pérdida de una rueda (totalmente desintegrada) y las necesarias paradas para cambiar las presiones de las ruedas.

Una etapa con extensas zonas de navegación sobre dunas que Carranza y Fernández pudieron sortear con mucho oficio para llegar a la meta en Pisco. Llegada al Vivac con el sol ya cayendo, tiempo para reparar y hacer balance.

J.C. Fernández: “Hemos solventado una de las etapas más difíciles con coraje y valor. Todos los años que llevamos conduciendo por dunas y arena también nos ha ayudado. Unas dunas y paisajes espectaculares, hemos tenido momentos complicados y lo hemos pasado un poco mal. Etapa concluida y estamos ya pensando en la novena ”.

R. Carranza: “Para mí la etapa más dura del Dakar. La navegación hoy ha sido dificilísima. La labor de Juan Carlos ha sido impresionante, hemos pasado por todos los waypoints sin perdernos. Hemos tenido momentos muy complicados, donde nos podíamos haber quedado atascados pero los hemos solventado. ¡Solo nos quedan dos!”.

El Promyges Team Terminaba la etapa en décimo octava posición, lo cual les deja décimo séptimos en la general. Cabe destacar que a estas alturas la categoría del Promyges Rallye Team, SxS, marca un porcentaje de abandonos cercano al 33%.
La novena etapa del Dakar consistirá en un bucle con salida y llegada en la localidad de Pisco. 313 kilómetros cronometrados con apenas 56 de enlaces. Jornada muy traicionera, con 100 kilómetros de dunas y arenas de inicio, para continuar con pistas rápidas y amplias. El terreno está muy blando y los pilotos tendrán que tener precaución, la zona final la etapa cuenta con dunas cortadas que pueden ser una trampa si no se navega con extrema precaución. Las rodadas de las primeras jornadas harán más difícil la orientación de los pilotos.

Carranza y Fernández saldrán a tramo a las 15:30 (hora española) y se estima que cruzarán la meta sobre las 20:15 horas.