El Ayuntamiento de Salamanca tiene claro el asunto del Campo de Fútbol Reina Sofía, aunque sigue trabajando en una solución para afrontar la imposición de la Federación Española de Fútbol que obliga a disputar los partidos sobre hierba natural a los equipos de Primera y Segunda División y Primera RFEF, como han sido las reuniones celebradas esta mañana en el Consistorio.

En este sentido, para que se pueda modificar el césped del campo de fútbol Reina Sofía y que cumpla estos nuevos criterios de la federación, el consistorio ha explorado varias vías de trabajo para que tanto el Real Monterrey como su cantera y la cantera de Unionistas cuenten con unas instalaciones deportivas acordes a sus necesidades. Un asunto que dejó claro el alcalde, Carlos García Carbayo, a preguntas de los medios de comunicación.

Además, el alcalde fue claro, "una solución aceptable debe pasar por no perjudicar a otros equipos en beneficio de uno solo". Esta ampliación permitiría el cambio en el campo actual a césped natural sin que se expulse a los equipos de fútbol del Real Monterrey de las instalaciones, como alguna alternativa propuesta al Ayuntamiento pretendía. A tener en cuenta que el Real Monterrey es uno de los equipos más veteranos de Salamanca y, además, quien siempre ha utilizado las instalaciones del Reina Sofía.

Obras por valor de 300.000 euros de las arcas municipales

Así, la opción elegida por el consistorio pasa por la ampliación de los dos campos de fútbol 7 que se están construyendo junto al campo Reina Sofía y que se encuentran prácticamente terminados, a falta de equipamiento, para que puedan ser utilizados como un campo de fútbol 11. 

Para llevar a cabo esta solución, el ayuntamiento deberá ejecutar obras por valor de casi 300.000 euros que consistirán en el traslado del muro Este de la instalación hasta el límite del sistema viario; el traslado de los sistemas de riego y de iluminación, la ampliación de la red de drenaje y el equipamiento.

La ejecución de estos trabajos requiere una tramitación administrativa que implica un plazo aproximado de cuatro meses y que consistiría en la finalización del actual contrato de la construcción de los campos de fútbol 7, la redacción de un nuevo proyecto, la obtención de la disponibilidad de los terrenos necesarios que no son propiedad del consistorio, la licitación de las obras y su posterior adjudicación. Una vez superada la fase administrativa y adjudicadas las obras, éstas tendrían un plazo de ejecución estimado de tres meses.