El entrenador del Salmantino UDS, Ramón Calderé, está en la cuerda floja. La derrota contra el Bembibre del pasado domingo en el estadio Helmántico, tras ir ganando dos a cero, ha dolido mucho. Máxime cuando el líder Unionistas ganó y el Salmantino está a siete puntos y empatado con el cuarto puesto.

Considera Calderé que la afición del Helmántico es muy exigente y “parece que hay en casa una presión añadida”, porque “hay acciones técnicas de jugadores que están entrenando bien y no salen”, aunque también hace autocrítica: “Quizá no se ha acertado en el planteamiento o en los cambios”.

No obstante, también asegura el entrenador del Salmantino que “hay cosas que te sorprenden en un equipo que aspira a ser campeones y este camino no es el correcto”. Y teniendo en cuenta las salidas en el mercado invernal y las bajas por lesión, “se ha demostrado hoy que tienen que venir jugadores ya”.