Cerealto Siro Foods y el comité de empresa han ratificado esta mañana a puerta cerrada el acuerdo alcanzado para garantizar la viabilidad de la planta de galletas de Venta de Baños (Palencia)  en la que trabajan 200 personas y mantener la actividad, al menos, cuatros años más.

Este acuerdo ya firmado, llega tras meses de negociaciones en los que tanto la compañía como los representantes de los trabajadores y las propias administraciones han trabajado en busca de una solución que evitara el cierre de la planta."El plan incluye un plan de inversiones, que tomará forma en los próximos meses y supondrá mejoras progresivas de las instalaciones y maquinaría de la fábrica", han comunicado desde Cerealto. 

Esa propuesta fue sometida a votación de los trabajadores el pasado viernes 4 de agosto. De los 184 empleados censados, participaron en el sufragio 157 de los cuales, 91 votaron a favor mientras que 64 lo hicieron en contra. De esta forma, y tras conseguir el respaldo de la plantilla, se selló el acuerdo entre Cerealto y los trabajadores del centro.

Dicho acuerdo incluye un plan de inversiones que tomará forma en los próximos meses y supondrá mejoras progresivas de las instalaciones y maquinaría de la fábrica. Además, se garantizan cuatro años más de trabajo a cambio de que trabajadores hayan aceptado una reducción salarial de unos 130 euros al mes.

Han tenido que aceptar también algunos otros recortes como el de dejar de cobrar el complemento que recibían en caso de incapacidad temporal y se han comprometido a que 56 de los trabajadores se postularán para las salidas voluntarias que se realizarán hasta el 31 de diciembre de 2024 con una prestación equivalente a 33 días de sueldo por año trabajado y 20 mensualidades.

La presidenta del Comité de Empresa de la planta de galletas VB1 del grupo multinacional agroalimentario Cerealto Siro Foods, Mar Rodríguez, ya valoró en declaraciones a Ical de manera “muy positiva” el acuerdo logrado. Lo hizo una vez supo que la votación de los trabajadores respaldaba la toma de esta decisión. “No se trataba de un convenio, se trataba de mantener la planta abierta, los puestos de los trabajadores, y todo eso hay que ponerlo en valor encima de la mesa”, afirmó.