El impresionante paisaje de Las Médulas, el corazón rojo del Imperio Romano

El impresionante paisaje de Las Médulas, el corazón rojo del Imperio Romano César Sánchez Ical

León

Así son Las Médulas, el corazón rojo del Imperio Romano que se tiñe de negro: "Es de los lugares más hermosos del mundo"

Esta mina de oro a cielo abierto es una de las grandes joyas de Castilla y León, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1997.

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Hablar de Las Médulas es hablar de historia, cultura y un paraje natural único en España. Es la mayor mina a cielo abierto del Imperio Romano, un entorno declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1997.

Un paisaje ideal de colinas rojizas que se entremezclan con la vegetación y que pasan por ser una de las maravillas naturales de El Bierzo, en la provincia de León. Ahora, ha transformado su precioso color rojo a un triste negro teñido por los incendios que en los últimos días azotan a esta zona de la Comunidad.

Un paraje natural afectado por las llamas que comenzaron el pasado sábado en Yeres y de las que, por ahora, no se conocen los daños que han provocado en la zona. Aunque algunos vecinos ya han compartido instantáneas de cómo una zona con tanta vida, la ha perdido en escasos días.

Durante el Imperio Romano, Las Médulas fueron una importante mina de oro a cielo abierto, por lo que en el terreno se facilitaron una serie de accesos para su extracción y se montó una compleja obra de ingeniería para la extracción del agua.

Un importante avance en el que tardaron más de cien años y que tuvo un gran impacto sobre el entorno, haciendo que la tierra y el agua acabaran modelando el precioso paisaje que hasta hace unos días se podía ver en la provincia leonesa.

Turistas en una ruta por Las Médulas

Turistas en una ruta por Las Médulas César Sánchez Ical

El paisaje actual es una mezcla de montañas erosionadas, rodeadas de densos bosques de castaños y robles. El contraste de la tierra rojiza con la vegetación verde es lo que hace de Las Médulas un lugar especial, espectacular y visualmente único.

Las formaciones geológicas que quedan del proceso minero, las cuevas, los cañones y las laderas erosionadas son una muestra tangible del ingenio romano. El nombre de Las Médulas proviene de la palabra 'médula' en referencia a las entrañas de la tierra que se excavaban para extraer el oro.

En la explotación aurífera de Las Médulas, las partículas de oro aparecen en estado libre. Por ello, era necesario deshacer la montaña, lavar el conglomerado para recoger el oro y evacuar los estériles resultantes fuera de la mina.

Además de su belleza geológica, existe una rica biodiversidad. Un espacio con una gran variedad de flora y fauna adaptada a sus condiciones kársticas, lo que lo convierte en un entorno ideal para el ecoturismo.

Foto aérea de Las Médulas

Foto aérea de Las Médulas J.L. Pecharromán (Instituto de Historia del CSIC) / ICAL

Es precisamente la vegetación la que más se ha visto afectada por el fuego. Muchos de sus castaños centenarios han sido arrasados. Joyas de la naturaleza que hoy en día siguen siendo explotados por los agricultores. 

Uno de los principales atractivos turísticos es el Mirador de Orellán, al que se accede siguiendo un camino perfectamente transitable en coche. Las vistas desde este lugar permiten observar hacia el oeste la imagen más típica de Las Médulas, el enorme espacio excavado y, al otro lado, unas fuertes pendientes.

Este mirador, que es uno de los más demandados por los turistas, se ha visto afectado por la virulencia de las llamas. Un lugar que, según aseguran desde la Fundación Las Médulas, es un "paraíso cultural y natural".

Zonas de Las Médulas arrasadas, dejando un paisaje oscuro

Zonas de Las Médulas arrasadas, dejando un paisaje oscuro César Hornija Ical

Afirman que observarlo desde sus miradores es "el mejor regalo para el viajero" puesto que permite detenerse en busca de su belleza. Existen varios para contemplar esta espectacular imagen como es el mirador de Reirigo, el de Las Pedrices o el de Chao de Maseiros, que son el "epicentro de las mejores panorámicas".

Asimismo, según las luces del día que iluminan este emblemático lugar de Castilla y León, el paisaje cambia. Unas que encienden con tonos rojizos los materiales sedimentarios de Las Médulas convirtiéndolas en "un espectáculo natural de luz y color".

Sin duda, Las Médulas es "uno de los lugares más hermosos del mundo" gracias a su peculiar "orografía surgida de la mano humana y la erosión del terreno".

En este entorno es posible desarrollar diversas actividades y hay varios instrumentos que ayudan y guían durante el camino. Uno de ellos es el Aula Arqueológica, que también se ha visto afectada por las llamas, ubicada a la entrada del pueblo.

Este espacio en el que comprender todos los detalles de un lugar único. Asimismo, existen diversos itinerarios. Algunos de ellos con puntos de información sobre el terreno como la mina, los dos castros prerromanos de Castro de Borrenes y el Castrelín de San Juan de Pazuelas y uno de asentamientos romanos, con el poblado metalúrgico de Orellán.

Pueblos devastados

Los pueblos de Las Médulas guardan como seña de identidad su arquitectura popular en piedra y madera. Siguen vivas celebraciones de festividades con raíces inmemoriales, las habilidades y conocimientos artesanales se aplican con las mismas técnicas de antaño.

Todavía se escucha el habla tradicional gallego- leonés para denominar lo cotidiano y se sigue trabajando el campo como manda la tradición, en armonía con la naturaleza.

Pueblos aledaños a Las Médulas, devastados por los incendios

Pueblos aledaños a Las Médulas, devastados por los incendios César Hornija Ical

Estos días, las imágenes han sido de desolación y tristeza. Cerca de 700 personas han tenido que abandonar sus casas por la proximidad a las llamas como ha sido el caso de Las Médulas, Carucedo, Orellán, Voces, Montes de Valdueza Llamas de Cabrera y Santalavilla.

Además, confinaron las localidades de La Chana y Borrenes. En algunos municipios, como el de Carucedo, ha sido tan enorme el daño causado que hasta el alcalde, Alfonso Fernández, ha pedido la declaración de zona catastrófica para "recomponer" lo perdido y "recuperar el espacio paisajístico" de la localidad que ha sido arrasado.