La Policía Local de Burgos ha detenido a un joven de 22 años por un presunto delito de atentado contra agentes de la autoridad. 

Los hechos se remontan al pasado domingo 29 de octubre, cuando la Policía fue alertada de que en el número 12 de la calle Las infantas se había localizado a un joven en el interior del ascensor que, al parecer, había perdido el conocimiento. 

Nada más llegar, el alertante confesó a los agentes de la Policía Local que se trasladaron al lugar que no conocía a este joven como vecino del inmueble y que, al no responder a sus requerimientos, había llamado al servicio de emergencias 112. 

Entonces, los policías procedieron a interesarse por el estado de salud de esta persona, consiguiendo que se despertara, aunque un tanto aturdida. 

Tras ello, el joven en cuestión empezó a insultar y a despreciar a quienes intentaban ayudarle, negándose a ser asistido por los servicios sanitarios. 

Posteriormente, mientras los agentes se entrevistaban con la madre del joven, este acometió de forma sorpresiva y violenta contra uno de los policías, que, tras lograr esquivar la agresión, consiguió reducirle, aunque sin impedir que el chico dejase de insultar a los agentes e incluso a escupirles. 

Por todo ello, finalmente, los agentes procedieron a su detención y a su posterior traslado a calabozos, quedando a disposición judicial.