Imagen de la lengua de polvo sahariano a su llegada a la Península Ibérica.

Imagen de la lengua de polvo sahariano a su llegada a la Península Ibérica.

Región

Una gran lengua de polvo sahariano llegará a Castilla y León esta semana

El ascenso de una masa de aire muy cálida favorecerá la irrupción de polvo en suspensión en la Comunidad

3 abril, 2024 14:42
Después de una Semana Santa pasada por agua, Castilla y León espera altas temperaturas esta semana, que podrían alcanzar los 25 grados, y también la llegada una gran lengua de polvo sahariano. Aunque se espera un ambiente estable en buena parte de España, este no será total ya que irán llegando frentes que dejarán precipitaciones tanto en el tercio septentrional como en la vertiente atlántica. Además, está previsto que durante la segunda semana de abril se descuelguen vaguadas con bajas presiones en el oeste de la Península.
 
La presencia de estas borrascas, provocará el ascenso de una masa de aire muy cálida y que es anómala para estas fechas, con la isotermo de 20 grados a 1.500 metros en la Península y en Baleares. Esta circulación tan pronunciada del sur favorecerá la irrupción de polvo en suspensión.

El polvo del Sáhara a través de Europa

La calima permitirá un ambiente turbio en España. Aunque se trate de un fenómeno que es frecuente en el país, según el modelo de referencia de Meteored es esperable una gran lengua de polvo en suspensión por todo el oeste de Europa el fin de semana. De este modo, llegaría a países como Francia, Reino Unido, Suiza, Países Bajos, Bélgica o Alemania y también a Dinamarca, Suecia o Noruega.
 
Además, podrían darse lluvias de barro o sangre en estos países y favorecer la caída material particulado. En el caso de caer en zonas nevadas, permitiría la rápida fusión de la nieve y esta perdería calidad, quedando también teñida con color naranja.
 
Durante el fin de semana, una nueva vaguada se verá descolgada sobre el oeste de Europa y empujará a la masa de aire cálido y a la calima hacia el centro del continente. En el este de Canarias y en algunas zonas de la Península Ibérica, entre ellas Castilla y León, las concentraciones de partículas PM10 pueden pasar de los 45 μg/m³, que es el límite hasta el que el aire se considera saludable por la Organización Mundial de la Salud (OMS).