Imagen del pleno de las Cortes de Castilla y León del pasado curso

Imagen del pleno de las Cortes de Castilla y León del pasado curso Leticia Pérez ICAL

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Las Cortes engrasan la maquinaria para su primer pleno del curso con ambiente y temas tensos

Este miércoles 5 y jueves 6 de septiembre da comienzo el curso político con una oposición dispuesta a desgastar el pacto entre PP y Vox, quienes presumen de "gobierno eficaz"

4 septiembre, 2023 07:00

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Las Cortes de Castilla y León abren sus puertas para acoger un nuevo curso político. Una escena que viene marcada por el contexto nacional donde tras las elecciones generales del 23-J existe una marejada de incertidumbre ante los posibles pactos. Con este escenario, el gobierno de coalición entre Partido Popular y Vox esperan vivir un año más tranquilo que el anterior, aunque sabedores de que en cualquier momento puede surgir la chispa que lo cambie todo.

La primera sesión de las Cortes se vivirá este miércoles 6 y jueves 7 de septiembre, así se evita tener que coincidir el martes por la tarde con la Vuelta Ciclista a España que colapsa la ciudad de Valladolid. Un estreno que se espera duro. El grupo parlamentario socialista llega con toda la artillería y pretendo aprovechar el efecto Jenni Hermoso para menguar la relación entre los dos socios de gobierno autonómico. Luis Tudanca no ha querido dejar escapar la oportunidad de ahondar en materia de igualdad. Es por ello por lo que, en el próximo pleno, la primera iniciativa que llevarán tendrá que ver con el deporte puesto que consideran que la Junta debe tener como prioridad "garantizar la igualdad efectiva entre hombres y mujeres en este ámbito".

[Así será el nuevo curso político en Castilla y León tras la bandera blanca entre PP y Vox a nivel nacional]

El grupo socialista pretende hacer de nuevo de la violencia machista el principal punto de enfrentamiento entre PP y Vox. Así lo hicieron también esta semana pasada con el asesinato de la mujer en Béjar. La intención es que Mañueco se posicione y se decida a poner en marcha la ley de violencia intrafamiliar. Punto exigido por Vox en su acuerdo de gobernabilidad, y la famosa ley de concordia.

De momento, el consejero de la Presidencia, Luis Miguel González Gago, ha salido al paso afirmándose que se cocina a fuego lento para que en “el momento oportuno se pueda servir”, pero alertó de que también está condicionada por el desarrollo reglamentario de la ley estatal. La idea es que esta receta no acabe por quemarse y se tenga que encender la alarma antiincendios en el colegio de la Asunción.

Debate ideológico

El debate ideológico, más que la esencia práctica, seguirá siendo el protagonista en estas primeras sesiones. El Grupo Socialista también llevará para su debate en un próximo pleno de las Cortes una iniciativa en la que aboga por retomar las políticas eficaces en defensa de la promoción e identidad institucional de Castilla y León. Según la oposición socialista, la Junta utiliza la imagen institucional de la Comunidad con fines partidistas, “manoseando” el Estatuto de Autonomía, suprimiendo la celebración del Día de la Comunidad Autónoma o con “discursos machistas e incluso xenófobos en nombre del Gobierno de Castilla y León en su propio Parlamento, en la casa de todos los castellanos y leoneses”.

La estrategia de Tudanca es clara, seguir poniendo sobre la mesa temas donde las formaciones no se pongan de perfil, sin medias tintas. Incluso el portavoz socialista no tiene claro que Mañueco vaya a seguir manteniendo la coalición. “Quien adelantó las elecciones y dinamitó un Gobierno por Twitter. Si le conviene, hará igual con Vox, al que se le está poniendo una cara de Ciudadanos que no puede con ella”, ha afirmado esta semana pasada.

Por su parte, la bancada popular y de Vox lo tiene claro, el enemigo sigue siendo el sanchismo. La estrategia será llevar la política nacional al hemiciclo autonómico. Mañueco volverá a sacar pecho con sus últimas medidas como la casi gratuidad de los libros, las ayudas a empresas y el cheque de 2.000 euros para venirse a vivir al mundo rural de Castilla y León. Por supuesto, las negociaciones de Pedro Sánchez con los partidos nacionalistas e independentistas para formar gobierno nacional volverán a ser tema de controversia. “No las habrá, la Constitución es intocable. Lo que se negocie para unas autonomías se negociará para todas”, ha adelantado el líder del PSOE, mientras que el pasado viernes, con el ministro Planas de testigo, ya se encargó de criticar las ofensas que el Gobierno central ha realizado contra la Comunidad.

Debate y presupuestos

Además, en la segunda quincena de septiembre será el momento del debate de política general, retrasado en el mes de junio para no interferir en la campaña y elecciones generales del 23 de julio. Un momento esperado por todos, tanto para la oposición, con cuchillo entre los dientes, y para Mañueco, que quiere sacar pecho de una “buena gestión” y de un gobierno “eficaz y útil”.

Y por supuesto en el horizonte, el presupuesto para el próximo año. La intención de la Junta es presentar y aprobar los Presupuestos Generales de la Comunidad para 2024 en este periodo de sesiones, como está regulado, pero Mañueco ya ha reconocido “incertidumbres” por la formación del nuevo Gobierno y no contar con los datos básicos. Aunque de momento se están “dando los pasos” en la elaboración de las cuentas del próximo ejercicio.

Entre PP y PSOE, el socio de gobierno, Vox. La actitud del vicepresidente Juan García-Gallardo y de sus procuradores es una incógnita. La bandera blanca elevada por Santiago Abascal en las últimas semanas de cara la investidura puede convertirse en cualquier momento en bandera pirata y mandar abordar el barco. También es cierto que los nuevos gobiernos autonómicos formados en otras comunidades por esta misma alianza pueden hacer eliminar el foco de atención de Castilla y León. Aunque todo dependerá del tono que el líder autonómico de Vox y su consejero Veganzones quieran imponer en el parlamento.

Por su parte, el Grupo Mixto formado por Unidas Podemos, Ciudadanos y Por Ávila, con sus únicos procuradores, seguirán con su política agresiva contra la gestión de la Junta, en especial la alimentada por Pablo Fernández (UP) y Francisco Igea, de Ciudadanos, o lo que queda de ellos. Mientras que Pedro Pascual continuará con sus propuestas para mejorar la provincia abulense.

Además de UPL y Soria Ya. Las dos formaciones locales llegan con dinámicas diferentes. Los leoneses exultantes después de haber obtenido unos brillantes resultados en las elecciones municipales, mientras que los sorianos algo bajos de moral tras no conseguir su objetivo de un escaño en las pasadas Generales.

El inicio de un nuevo curso que vendrá cargado de tensión y de polémica. Muchas veces se ha pedido bajar el tono incendiario que se vive en la política autonómica, pero visto los antecedentes y los ingredientes que se están poniendo en el guiso, es complicado de afirmar.