La ciudad de Zamora celebra el segundo premio del sorteo de El Niño, aunque con muchas incógnitas y con ganas de saber. El restaurante Oasis ha vendido por el sistema de terminal el número 21.816, aunque nadie en este local de hostelería sabe cuántos décimos, ni a quién. "Es imposible", han reconocido Raquel Herrero y Sandra Martín, dos de las camareras que, a buen recaudo, han sido quienes han llevado la suerte a la capital del Duero.

La única certeza, hasta este momento, es que este bar ha repartido la suerte a alguno de sus clientes. Un local en el que "se juega mucho", como han señalado las camareras. "Los sábados y los domingos somos el único sitio de todo el barrio que está abierto, por lo que nuestra clientela es muy amplia y además estamos en un barrio de jugadores", han añadido.

La cercanía del restaurante Oasis con el Hospital Provincial de Zamora ha hecho aún más complicado saber por dónde pueden ir los tiros de los agraciados. "Mucha gente que visita a sus enfermos en el hospital viene aquí a comer y compra, así que podemos estar hablando de cualquier persona de cualquier sitio", han explicado Herrero y Martín.

La suerte, por lo tanto, se ha dejado ver por la ciudad de Zamora, aunque nadie todavía conoce el alcance de la lluvia de millones.

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