Tras la victoria brillante (sí, brillante porque se ganó al líder) ante el Huesca el pasado viernes en el estadio José  Zorrilla, sufriendo eso sí tras tirar un 2-0 a favor y marcar un tanto en el tramo final del choque, ante un equipo con diez, el Pucela no puede fallar en Córdoba.

No lo puede hacer porque juega ante un rival que está prácticamente descendido como el Córdoba que aunque ha mejorado con respecto al inicio de la temporada, suma cuatro derrotas consecutivas, la última ante el Granada por 1-2 en su feudo la semana pasada pese a empezar ganando 1-0 y tras remontar el cuadro nazarí con dos tantos en los diez últimos minutos.

Los de Luis César son octavos en la tabla con 42 puntos pero tienen un déficit lejos del Estadio José Zorrilla, donde solo han ganado al Sevilla Atlético y al Barça B y vienen de perder en Los Cármenes ante el Granada dando una muy mala imagen, sobre todo, en la primera mitad del choque.

Los pucelanos bajan muchos enteros lejos de su feudo por falta de concentración u otros muchos factores y han de ser conscientes de que si quieren estar al final de la temporada en los puestos, al menos, de Playoff, deben de hacerse fuertes en casa y pescar con más frecuencia lejos del santuario blanquivioleta.

Al Pucela le espera tras el choque ante los andaluces, el Rayo Vallecano en Zorrilla en un partido clave para dar un golpe tremendo encima de la mesa. Una semana más tarde viajará a Alcorcón para enfrentarse a un conjunto de mitad de tabla, antes de recibir al Almería.

Estamos en la jornada 28 y el conjunto de la capital del Pisuerga está a dos puntos del Playoff y a cinco del ascenso directo que precisamente marca el Rayo Vallecano. Llega el tramo clave de la temporada para saber si este equipo puede luchar por pelear y estar arriba con el ascenso como objetivo o acaba conformándose con estar, una temporada más, en la categoría de plata del fútbol español.