La EPA que hemos conocido esta semana ha arrojado muchos indicadores a tener en cuenta y a analizar. España ha superado los 19 millones de ocupados por vez primera desde 2009, cayendo la cifra de parados en 182.600 personas hasta los 3.731.700, con una tasa del 16,38% de paro en lo que se convierte en el dato más bajo desde 2008.

En Castilla y León el número de parados cayó en 17.000 personas en el tercer trimestre del año, un 10,33 por ciento, frente a un descenso nacional del 4,66, lo que sitúa el total de desempleados de la Comunidad en 147.700 con una tasa de paro del 13,02 por ciento, por debajo de la media nacional, situada en el 16,38% según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), que ha hecho públicos esta semana el Instituto Nacional de Estadística.

Analizados los datos regionales nos vamos a centrar en Valladolid, que a lo largo de estos dos años ha presentado una bajada en la tasa del paro aunque con matices y haciéndose realidad esa premisa que apuntan los economistas de la desaceleración para 2018.

En el primer trimestre de 2016 la cifra de parados en la capital del Pisuerga se situaba en el 16,1% llegando a bajar hasta el 12,5% en el tercer trimestre de ese mismo año. En 2017 estas cifras volvieron a crecer llegando hasta, según datos de la última EPA, el 13,74%.

En lo que a la tasa de actividad se refiere, la de Valladolid se sitúa en el 56,59% viéndose reducida en esta última encuesta con respecto al trimestre anterior que se situaba en el 57,03. En lo que a la tasa de empleo se refiere, se sitúa en el 48,81% en la actualidad.

Habrá que esperar a la campaña de Navidad y al inicio del 2018 para continuar apreciando la evolución del paro a nivel nacional y de Valladolid en particular para comprobar si se convierten en verídicas esas estimaciones de los economistas que apuntan a una desaceleración de la economía tras años de crecimiento lo que volvería a poner en jaque al sistema laboral de nuestro país y haría tambalearse a nuestra economía.