El Ayuntamiento de Valbuena de Duero, representado por su alcalde, José Augusto Rodríguez, haciéndose eco de las inquietudes de la población a la cual representa, así como del entorno, acudirá el próximo lunes, día 11 de septiembre a la Dirección General de Carreteras del Valladolid, con el objeto de depositar el recurso de reposición a la contestación a las alegaciones presentadas por este Ayuntamiento a la Información oficial y pública del proyecto de trazado “Autovía A-11” del Duero, en el tramo de Quintanilla de Arriba (Oeste)-Olivares de Duero, como parte interesada, la cual se acompañó, en su momento de más de 1.300 firmas.

Según han explicado desde el Ayuntamiento, a la vista de la contestación recibida se puede observar el Ministerio ha examinado con detenimiento las alegaciones presentadas por esta Corporación el 28 de noviembre de 2016. Sin embargo no se ofrece una respuesta concluyente a los aspectos técnicos clave de las alegaciones, como la enorme pendiente entre el páramo y el valle a través del viaducto, el carril lento de subida, los problemas meteorológicos, etc.

Tampoco se recoge contestación alguna al análisis de las declaraciones de impacto ambiental de los años 2006 y 2012, donde, en la zona del Monasterio de Santa María de Valbuena, se produce una distorsión de la realidad en las imágenes que se adjuntan en el proyecto, la cual además se presenta por tramos, en lugar de ser afrontado en su totalidad.

No se reconsidera ni fundamenta que el Canal de Riaza ha dejado de tener interés público, dado que es una infraestructura que desde hace varios años ya no tiene uso, habiéndose sustituido por un sistema de modernización del regadío que sí se ve seriamente afectado por la ejecución de este trazado. No se reconsidera la el hecho de que los planos recogidos en la cartografía son antiguos, produciéndose discrepancias con la realidad.

El Ayuntamiento de Valbuena de Duero se muestra en contra del trazado aprobado por estos motivos:

-  El trazado diseñado supone unos elevadísimos costes económicos que se afrontarán con fondos públicos, costes que no son propios del territorio en el que se va a ejecutar el proyecto, sino de zonas mucho más abruptas que la Meseta Castellana, existiendo alternativas mucho más económicas y con menor impacto que la elegida.
-  Se reconoce un incremento sustancial de la siniestralidad respecto a otros trazados planteados (67,85 %).
-  La contaminación que se generará será significativamente superior al resto de las opciones, puesto que las diferencias de nivel y el incremento en cuanto a kilómetros del trazado lo hacen inevitable.
-  El impacto ambiental en un medio natural de gran riqueza es elevadísimo.
-  La ejecución del Corredor Norte-Duero de la Autovía A-11 no va a descongestionar el tráfico de la N-122, ya que las condiciones desfavorables de este nuevo trazado disuaden 
de su utilización a los posibles usuarios, especialmente, a los vehículos pesados.
-  Interfiere significativamente en el modelo desarrollo económico del entorno, al tener un elevado impacto en el patrimonio (paisaje, monumentos, rutas, etc.), el cual está creando numerosos puestos de trabajo y generando riqueza económica que trascienden de las fronteras locales, incidiendo en la economía regional; un claro ejemplo es que a nuestras bodegas y alojamientos turísticos vienen a trabajar personas de la capital de provincia, Valladolid, incluso de enclaves más lejanos. Aspecto a tener en cuenta considerando la 
situación económica nacional.
-  El trazado pone en peligro un sistema de modernización del regadío desarrollado 
recientemente en la zona y cofinanciado con fondos europeos, cuyo deterioro podría suponer la ineficacia del mismo y, por tanto, la reconsideración de la aportación de la Unión Europea a este proyecto, o, en su caso, la reparación de este sistema tendría unos costes desproporcionados.
-  Igualmente, la ejecución del trazado deteriora las infraestructuras por carretera existentes a nivel provincial, no habiéndose reflejado en el proyecto los costes de reparación de las mismas.
-  Aunque el tramo que nos afecta a nosotros sea el que transcurre por el término municipal de Valbuena de Duero, otros tramos, como los que cruzan el Valle del Botijas o el del Duratón, próximos a Peñafiel, responden a las mismas características.

Durante años, este Ayuntamiento, empresas locales y población del entorno venimos advirtiendo sobre las nefastas consecuencias que tendría para todos y presentando las pertinentes alegaciones; sin embargo, nuestras demandas no han sido estimadas. Del mismo modo, consideran que es muy necesaria la construcción de la Autovía A-11, pero que no se puede hacer a cualquier precio. El proyecto que se plantee debe ser el más óptimo a nivel económico, medioambiental y social, y existen alternativas viables que responden a estos criterios, concluyen.