A pesar de las últimas lluvias que se han producido en la provincia, muchos han sido los días que han pasado sin caer ni un litro de agua para nuestras tierras, ríos y embalses, que comienzan a presentar niveles de agua inferiores a las medias de los últimos años por las mismas fechas.

Y es que, tener un invierno tan seco como el que se esta produciendo en la provincia de Zamora tiene consecuencias y prueba de ello son los embalses o algunos ríos de los municipios zamoranos que se encuentran en un 'crítico' estado de sequedad.

Los datos se reflejan en los embalses, que con menos aportaciones de agua y más calor, su nivel anda por debajo de mediciones pasadas. Es el caso del embalse del Esla, uno de los más castigados de la provincia, que muestra un estado muy 'pobre' no llegando ni a la mitad de su volumen.

Un volumen que el año pasado representaba casi el doble y que este año preocupa pese a que se destaca que la tendencia de volumen es ascendente y más, con las últimas lluvias de este sábado, que aunque no sean suficientes, ayudan a mejorar su capacidad y evitar tanta sequedad como se observa en las inmediaciones del embalse del Esla mostrando una sequedad absoluta de la tierra.