Uno de los 10 aficionados sancionados por el Real Valladolid tras los insultos racistas a Vinicius Junior podrá volver al Estadio José Zorrilla. El club ha decidido readmitir a este abonado después de que la Policía Nacional le identificase por error, quedando acreditada así su inocencia ante los hechos. Además, el Pucela le devolverá la cuantía económica correspondiente a los encuentros que se ha perdido desde febrero, momento en el que se dieron a conocer las medidas cautelares a tomar.

El Real Valladolid comunicó a esta decena de aficionados el pasado 9 de febrero que se les suspendía de forma "inmediata" el carné de abonados como medida cautelar, tras el acuerdo del Órgano de Disciplina Social del Club al estimar que se habían incurrido en diversos comportamientos de racismo e intolerancia. 

Un mes más tarde, el 9 de marzo, este mismo Órgano acordó retirar el carné durante tres años y medio a estos abonados, al entender que los hechos eran "muy graves". El club, que actúo bajo las directrices de la Policía Nacional, tras recibir la notificación de esta equivocación tomó la decisión de readmitir a este abonado al quedar acreditada su inocencia, según han trasladado fuentes del club a EL ESPAÑOL - Noticias de Castilla y León.

Desde la Policía Nacional explican a este periódico que tras recibir la correspondiente queja por parte del abonado, quedó demostrado que se encontraba en otra parte del estadio a la que supuestamente se decía que estaba cuando fue identificado. No obstante, aseguran que dicha incidencia fue "subsanada hace tres meses", coincidienco con la tramitación de las sanciones cautelares por parte del club, aunque este último sí reconoce que llegó a ser vetado y posteriormente readmitido. Por otro lado, la persona con la que fue confundida y que presuntamente sí cometió el ilícito, fue identificada hace un mes.

El fondo del asunto viene desde el pasado 30 de diciembre, cuando los blanquivioletas se enfrentaron en su feudo ante el Real Madrid. En aquel encuentro, el jugador merengue Vinicius Junior fue víctima de diversos insultos racistas provenientes de un pequeñísimo número de aficionados que hicieron que incluso el propio futbolista lo denunciase públicamente tras viralizarse algunos vídeos en redes sociales.

El club siempre se ha mostrado impasible en estas situaciones y ha recalcado que tendrá "tolerancia cero" ante estos comportamientos, pero tras percatarse de este error de la Policía Nacional ha decidido levantar el veto a este aficionado inocente que había sido sancionado injustamente.