En 2015, Cristina Pedroche recibió el año nuevo en Antena 3 con un traje con transparencias y bordados de la firma Pronovias; una creación que muchos internautas vieron muy similar a una creación de Joshua Velázquez, quien este año compite en Maestros de la costura.

De hecho, ya en la primera entrega, emitida anoche, Raquel Sánchez Silva reavivó aquella polémica, cuando vio una foto que el joven canario tenía junto a su máquina. “Así de lejos, me ha parecido Cristina Pedroche, pero no lo es. Se parece muchísimo a lo que llevó Cristina Pedroche en la Nochevieja”, dijo la presentadora.

Joshua se defendió diciendo que no, que es una de sus mejores amigas, que trabaja como cantante de orquesta y que él le hace el vestuario. “Esto es que copiaste el vestido de Cristina”, le respondió Sánchez Silva. Entonces Josha aclaró que él no copió “nada” porque “Este vestido lo hice hace siete años, cuatro años antes de las Campanadas”.

Palomo Spain entró en la conversación, y le preguntó si él fue quien acusó de plagio al traje que tanto dio de qué hablar. “No, yo no acusé de nada, fue la gente por Internet. Yo nunca me pronuncié. Me llamaron de todos los sitios y nunca fui a ninguna tele”, declaró el talent, que admite que sí llegó a pensarse ir a los medios.

Tirando de hemeroteca, el portal Chance ha comprobado que entonces Joshua sí habló con algunos medios, pero se limitó a decir que se había enterado por las redes sociales, y admitía que su diseño era más humilde, y que estaba “seguro de que Pronovias no me ha copiado”.

Helen, primera expulsada

Joshua, que es auxiliar de enfermería, aunque no ejerce, y opositor a la Guardia Civil, fue precisamente el mejor concursante en la primera prueba, que consistía en rendir un homenaje al modista español Elio Berhanyer.

Tras una caótica prueba por equipos, en la que incluso se incumplió una premisa tan básica como ponerle el traje al maniquí, todos los concursantes fueron a la prueba de eliminación, si bien, los jueces valoraron el trabajo y la actitud de Marc y le dieron la opción de salvar a dos compañeros, incluido él mismo; Marc optó por salvar a la Brava y a Joshua.

Con los talents en el taller de nuevo, se enfrentaron a una prueba de confeccionar ropa vintage; ahí Helen hizo un “saco de patatas” que le hizo ser la elegida por los jueces para abandonar el concurso. Ella, enfada, declaró que ve “injusta la sensación” porque otros compañeros se habían saltado algunos pasos básicos en la confección de prendas, y lamentó irse “con una sensación agridulce de no haber podido demostrar mi potencial”.