A estas alturas, ya nadie duda de que Antonio Recio pasará a la historia de nuestra televisión. Un personaje con tal dimensión que corría el peligro de ensombrecer la carrera del actor que le interpreta, Jordi Sánchez. Sin embargo, a pesar de ello, el catalán nunca ha querido bajarse de La que se avecina en estos doce años de éxitos. 

“Cuando tuve miedo le dije a mi representante 'Oye, búscame películas'. De eso hace cinco años y ya he hecho bastantes”, confiesa el actor, que en los últimos años ha participado en Cuerpo de élite, Señor, dame paciencia, El mejor verano de mi vida, Bajo el mismo techo o Si yo fuera rico, entre otras.

Para ello ha contado, además, con la ayuda de los creadores de la ficción, Laura y Alberto Caballero. “Siempre me lo han puesto muy a huevo y superbien para poder hacer otras cosas. Nosotros estamos aquí cinco meses al año como mucho. Los jueves estoy en Barcelona ya, y cuando me ha salido una película y se puede hacer en más del 90% de los casos”, comenta. 

A mí repetir el espacio en otro sitio es lo que menos me apetece

 Se habla mucho de cuándo será el final de La que se avecina. ¿Los actores lo tenéis claro? 

Lo tenemos como lo ha dicho Alberto que yo hace cinco minutos antes le he preguntado y ha contestado lo mismo. No tenemos claro nada. A mí repetir el espacio en otro sitio es lo que menos me apetece. Si nos cambian de espacio, pues que sea en otro edificio o un piso en el centro. A mí, la familia del Recio me parece especialmente interesante, así que hagan lo que quieran: un tío tan convervador, tan megafacha, casado con una señora que se cepilla a toda la escalera, hombres y mujeres, y una hija transexual... me parece todo una maravilla. Da para muchísimo. Si hacen el spin off, encantado y si nos llevan todos a otro sitio, pues también. Que hagan lo que quieren. 

Durante todos estos años, ¿no has tenido ninguna crisis de estar cansado del personaje?

No lo he tenido porque siempre me lo han puesto muy a huevo y superbien para poder hacer otras cosas. Nosotros estamos aquí cinco meses al año como mucho. Los jueves estoy en Barcelona ya, y cuando me ha salido una película y se puede hacer en más del 90% de los casos. Además, creo que ellos (Laura y Alberto) son los mejores escribiendo comedia televisiva y eso se nota mucho cuando vas a hacer otras cosas. Estoy muy contento aquí. 

¿Ha tenido miedo de que te acabara comiendo el personaje en algún momento?

Cuando tuve miedo le dije a mi representante 'Oye, búscame películas'. De eso hace cinco años y ya he hecho bastantes. En ese sentido no me está pasando.

LQSA es de las pocas series que resiste en esta crisis de la ficción en abierto. ¿Por qué cree que es así?

Alberto ha dicho que es por los actores, pero yo creo que es por los guiones. Son importantísimos. Si el guion no está bien, el actor se ve forzado y está intentando sacar sonrisas donde no las hay y los actores lo pasan mal cuando tienen que hacer gracia donde no hay. En esta especie de constumbrismo punky que se han inventado me parece que es el ancho de todo esto.

¿Cómo te tomaste que el Recio se quedara en coma?

Me salió una película y me dejaron en coma. ¡Como me salga otra, no me podrán dejar en coma!

¿Y cómo crees que lo han llevado los espectadores?

Se metieron con los guionistas. Alberto lo tuvo que explicar y yo también lo aclaré. A mí me encanta que la gente se lo tomara mal, mejor eso que no dijesen que se alargara el coma.

El personaje me fascina, pero no me gustaría tener de vecino a un tío así

¿Cómo te pueden querer tanto con un personaje tan poco querible?

Al principio estaba asustado porque como es tan faltón, tan maleducado y se ríe de todos los colectivos no sabía si la gente se lo iba a tomar mal y me iba a decir algo por la calle. Pero han entendido de que es una comedia, que es un personaje que hace una crítica a un tipo de persona, al intolerante, al intransigente, al facha. Nunca, nunca, nunca me han dicho nada... Y hay material. El personaje me fascina, pero no me gustaría tener de vecino a un tío así.

Como dramaturgo, ¿da consejos a los guionistas?

No, no he hecho nunca. Cuando vine a LQSA venía de escribir una serie para TV3 y me lo hacían a mi. Dije 'joder, aquí todos los actores vienen con sus propuestas desde casa. Que cada uno haga su trabajo'. Es una putada, imagínate a 20 personas sugiriendo cambios constantes. Además, es muy marca de la casa que aquí hay que decir el texto clavado y tal como está escrito. Me parece muy bien porque puede ser un despiporre. Está bien que cada uno sepa cuál es su trabajo y que lo haga.

¿Ha incorporado algo de su cosecha al Recio?

Nada, nada. Lo que hago como actor es mío. Es una mezcla entre el guión y tener comedia, la dirección…. Los movimientos y los saltitos que hace son míos. Claro, es un trabajo de composición de actores, pero de texto nada. 

¿Tuvo a alguien como referencia?

No. Si te fijas, en los primeros capítulos, los personajes son muy diferentes a los de ahora. Han cambiado a medida que rodábamos. Recio era un señor que puteaba y que hacía ruido para molestar al de abajo, pero luego llegó la pistola. Fuimos aprendiendo, construyendo el personaje. O el personaje de Pablo Chiapella, un hombre que trabajaba en un banco y ahora…

¿Cómo crees que terminará Antonio?

Como es muy obtuso, ni aprende, ni mejora, ni cambia: morirá tal y cómo es. No aprende lecciones. Es también lo bonito de estos personajes de sitcom, que no cambian. 

Recio morirá tal y cómo es: ni aprende, ni mejora, ni cambia

¿Qué más proyectos profesionales más tiene?

Tengo pendiente de estar la película, que es por la que me dejaron en coma con Leo Harlem y que se llama Superagente Makey y luego estoy escribiendo un texto de teatro que me han encargado.

¿No escribe nada para televisión?

No, es que escribir para televisión es tela, ¿eh? Implica mucho tiempo y ahora estoy aprovechando que no volvemos a grabar hasta Reyes para escribir teatro.

¿No has tenido ofertas para otras series?

Es que no me interesa mucho. En una serie te tienes que concentrar. En una obra de teatro tienes cuatro meses. Si he tenido ofertas aquí, pero te tienes que dedicar a eso y mi primera profesión es la de actuar, que me gusta mucho. Soy un actor que escribe, no un escritor que actúa.