El pasado 2018, desde 35 euros uno podía adquirir, si tenía suerte, una entrada para la final del Festival de Eurovisión en uno de los balcones del Altice Arena de Lisboa, y a partir de ahí, si se quería mejorar la visibilidad y cercanía con el escenario, se podían encontrar boletos de hasta 299 euros para ver el show en la zona premium.

Sin embargo, para este 2019, los precios podrían subir, según los primeros rumores recogidos por un grupo de eurofans en Facebook, los precios de la final de 2019, que se celebrará el 18 de mayo, oscilarán entre los 281 y los 488 euros. Hay que recordar que, por cuestiones logísticas, el Centro de Convenciones de Tel Aviv no tendrá tanta capacidad como otras ediciones, y el público solo podrá disponer de unas 4.000 entradas en el recinto.

Para ofrecer mayor número, en la Green Room donde las delegaciones esperan las votaciones, habrá entradas VIP, que serán las más caras. Por otro lado, los precios se las semifinales se situarían entre los 305 y y 183 euros, y los ensayos de la semifinal, entre los 220 y los 85 euros.