La cuarta semana de expulsión está a la vuelta de la esquina, pero la gala de este jueves se presenta como especial ante los espectadores. Quique y Suso, eternos enemigos públicos dentro de la casa de Guadalix, se enfrentan por primera vez a la decisión de los espectadores y eso significará un antes y un después en el programa.

Este martes, durante la emisión de Gran Hermano: Límite 48 horas, los concursantes conocieron el porcentaje de eliminación dos días antes de saberse la decisión final: un 51% frente al 45% del segundo más votado. Dos concursantes muy igualados que se presupone que son Suso y Quique.

Esto ha dejado muy tocado al médico, que creía que su contrincante iba a ser eliminado por un alto porcentaje después de la bronca que protagonizó el pasado domingo amenazando a uno de sus compañeros. Sin embargo, parece que Suso tiene un gran apoyo dentro de la casa.

Este primer resultado ha provocado que Suso haya sacado pecho ante el resto de sus compañeros. "Me esperaba un 70% o algo así...pues sí que tengo apoyo. Lo agradezco", ha dicho el joven al conocer los porcentajes. 

El doctor también ha comentado los resulatdos: "Tengo a todos contra mí: a Suso, Amanda y Raquel fuera", argumenta. Pero la casa también ha hechos sus propios comentarios. "¿Cómo es posible que haya esa puta mierda de diferencia?", lamentó Marina. "A la gente de fuera no le haría gracias tener que convivir con una persona así", apuntó Nied, "Más morbo del que ya ha dado ya no va a dar más. Se va a venir arriba, pero qué va a hacer: más broncas?. Yo ya no voy a estar aquí más con él", reveló Carlos. "No se va a ir él (Suso)...Estoy amargada", sentenció Sofía.

"Yo si fuera de su familia estaría votando para que se fuera. No dejaría que se exponga más..va a tener problemas con el trabajo después de lo del otro día..Aunque a lo mejor Telecinco lo está enfocando de otra forma", comentó Aritz sobre las nominaciones y sobre Suso.