Alessandro Lequio y Antonio David Flores en un montaje de BLUPER.
Alessandro Lequio y Antonio David Flores o cómo Telecinco endurece su postura contra la violencia machista
El despido del histórico colaborador sigue la senda, salvando las distancias, de la expulsión del exmarido de Rocío Carrasco hace cuatro años.
Más información: Antonia Dell'Atte reacciona al despido de Lequio de Mediaset: "Una victoria de las mujeres asesinadas"
El despido fulminante de Alessandro Lequio de Mediaset España es una de las noticias de la temporada en televisión. Y, en cierta manera, sigue la senda de la de Antonio David Flores en 2022.
Fue durante la tarde de este miércoles, 19 de noviembre, cuando trascendía la decisión histórica del grupo con sede en Fuencarral de prescindir de uno de sus rostros más destacados (y polémicos) en los programas del corazón.
El exmarido de Ana Obregón aparecía por última vez en Telecinco, la que ha sido su casa en las últimas tres décadas, en Vamos a ver, el programa que pilota Patricia Pardo al mediodía. Su misteriosa desaparición en los instantes finales cobró sentido horas después.
Su despido se decidió tras una reunión que mantuvieron Mediaset y Unicorn Content, la productora con la que Lequio tenía relación contractual.
Todo ello después de que en la noche del martes 18 llegara un documento judicial al departamento jurídico de la compañía, en el que se daba veracidad al testimonio de malos tratos que Antonia Dell'Atte lleva denunciando en los últimos 30 años.
El detonante fue una entrevista que la modelo concedió a El País el pasado 11 de octubre, en el que hablaba sobre la violencia machista que sufrió por parte de Lequio. Sin embargo, esto es algo que Antonia lleva contando en diferentes medios desde finales de los noventa. De hecho, denunció en 1991, año en el que se hizo efectiva su separación, pero luego acabó retirando la demanda.
Años más tarde, Antonia volvió a contar en televisión -en los programas Gente de TVE y Abierto hasta el amanecer de Antena 3- algunos de los episodios vividos con su exmarido, al que acusó de maltratador. Fue entonces cuando el aristócrata se defendió y la demandó por calumnias en 2004.
Alessandro Lequio, en 'El programa de Ana Rosa'.
La demanda sería sobreseída al considerarse que la modelo aportó las pruebas "suficientes" para demostrar que no mentía, una figura legal que se conoce como exceptio veritatis, en un auto emitido por el juzgado número 35 de Madrid en enero de ese mismo año.
Este documento es al que se ha agarrado Telecinco para despedir a Lequio y en el que, efectivamente, se reconoce el relato de Antonia, pese a que en ningún momento existe sentencia condenatoria contra el italiano, ni se le ha juzgado siquiera por ello.
Su expulsión se ha producido en un momento en el que la sociedad está mucho más concienciada con este tipo de temas. Ya no se toleran, en ningún caso, este tipo de prácticas horribilis que hace años eran habituales en televisión.
Cuesta ver que se normalizara determinadas declaraciones de Lequio en el pasado. En estas últimas horas, muchos han recordado el momento en el que Lequio llegó a reconocer en Tómbola haber "tirado bofetones a las mujeres".
“Perro no come perro” #RocíoEnDirecto pic.twitter.com/NqAOs0xrD9
— Iago Blanco (@iagoblanco) April 21, 2021
Sin ningún tipo de pudor, el tertuliano decía que se trataban de discusiones de pareja en la que ella "le tira un bofetón y tú se lo devuelves".
El tertuliano, sin ningún tipo de pudor, aseguraba que eran discusiones de pareja en la que ella "le tira un bofetón y tú se lo devuelves". No hay "nada mal", decía.
El caso de Antonio David
La expulsión del rostro que ha acompañado a Ana Rosa en sus diferentes programas en Telecinco -lleva en su productora desde 2005, aunque antes fue colaborador de María Teresa- recuerda, salvando las distancias a la de Antonio David Flores.
El que fuera Guardia Civil fue apartado de todos los programas tras la emisión de los dos primeros episodios de la serie documental Rocío, contar la verdad para seguir viva. En ella, la hija de Rocío Jurado relató algunos episodios de violencia física que ejerció sobre ella el propio Antonio David, a los que se sumaron otros de violencia vicaria y psicológica.
Su despido se anunció en directo en Sálvame el 22 de marzo de 2021, si bien luego la Justicia lo consideró nulo y obligó a la empresa a indemnizarle.
Hay que recordar que aquel programa de La Fábrica de la Tele dividió a la cadena en dos bandos: los que defendían a Rocío Carrasco y los que abogaban por el derecho de Antonio David a responder.
Alessandro Lequio fue una de las voces más críticas contra Rocío Carrasco tras la emisión del documental 'Rocío, contar la verdad para seguir viva'.
En este segundo se encontraba Alessandro Lequio, quien llegó a afirmar en El programa de Ana Rosa que Rocío es "una mujer que no ha sabido sobreponerse a los golpes del destino" y que su historia es la del "fracaso de la maternidad".
"Creo que Lequio no ha entendido nada de lo que he contado. Debe ser que él es bastante parecido al ser [Antonio David] y, claro, perro no come perro", declaraba por su parte Rocío Carrasco, deslizando que ambos tenían un comportamiento bastante parecido de puertas para dentro.
Tolerancia cero
El despido de Lequio es todo un aviso a navegantes. Ahora estas prácticas tienen consecuencias. Se castigan. Telecinco, como todas, ha endurecido sus políticas internas en un momento en el que la sociedad está especialmente sensibilizada con la violencia machista.
La televisión de ahora ya no es como la de antes, donde las broncas, con todo tipo de insultos, disparaban los audímetros. Al hilo de esto, por cierto, Mediaset actualizó en 2023 su Código Ético incluyendo un protocolo de actuación en los realities con el objetivo de que surgieran nuevos casos como el de Carlota Prado.