Tras varios años sin pisar el plató, Frank Cuesta visitó El Hormiguero este miércoles para hablar de sus proyectos más recientes con Pablo Motos. El que fuese conductor de programas como Frank de la jungla o Wild Frank comenzó su intervención hablando de cómo se encuentra Yuyee Alissa Intusmith, su exesposa, que fue encarcelada de manera injusta por tráfico de drogas y permaneció seis años privada de libertad. Un tema del que hablaron los ante las cámaras en su último encuentro.

“Se ha recuperado psicológicamente, pero a la vez tiene un montón de taras. Se le han quedado un montón de miedos, cuando coge un avión, cuando ve un policía. Tuvo problemas para dormir”, narraba el comunicador, que dejó a su mujer sola con sus cuatro hijos en común por recomendación del psicólogo.

En la actualidad, Frank dirige un santuario en Tailandia, donde recoge todo tipo de animales para facilitarles su bienestar en un hábitat natural. En ese sentido, Pablo le preguntó que cuánta comida necesita al día, y Cuesta le contó que han plantado “muchísimo frutal, muchísima baya, y los animales se van acostumbrando a comer sus cosas. Y los que son carnívoros se comen a los otros”. De todos esos animales rescatados hay una muy especial llamada Chispas, una nutria que han intentado liberar hasta en cuatro ocasiones, pero que siempre vuelve. “Es como un perro”, aseguraba el invitado. “Con otras nutrias se comportan como nutrias, pero esta me entiende”, insistía.

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En Tailandia, Frank vive en el contenedor de un camión, algo que le ahorra visitas “porque aquí no viene ni dios”, y que a veces sale a echar gasolina y poco más. Reconoce, además, no tener amigos porque “los amigos siempre te traicionan, y por eso es mejor que cuanta menos gente cerca, mejor”. Tampoco tiene muchas amigas, y sobre sus relaciones íntimas, bromeó: “Me gusta follar solo, no con amigos”.

Aunque en el pasado Frank Cuesta hizo mucha televisión, lleva unos años apartado del medio. “Me aburrí de la tele. A mí lo que me gusta es divertirme, la televisión me divertía mucho hasta que te obligan a hacer cosas. Como programas de perros, que hice dos, y dije venga, ya está, se acabó la tele”, narraba. Sin embargo, ahora tiene un nuevo proyecto entre manos junto a Cristina Seguí, cofundadora de Vox. Llamado Carretera salvaje, nació de una idea de reunir a políticos de diferentes ideas en un viaje por el mundo, pero solo ella aceptó, mientras que Rufián o Monedero (al que se refirió como “el carteras”) declinaron la propuesta. De momento, queda unos dos meses de grabación, y con la visita de El Hormiguero está haciendo “el mejor punto de partida”, y que “ya todo el mundo sabe que estamos haciendo esto, y alguna cadena o plataforma lo querrá”.

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Sobre las anécdotas de los viajes de Frank, Pablo Motos hizo hincapié en las mordeduras que ha recibido, algo a lo que el presentador “no le encuentra la gracia. “Yo disfruto el dolor, ya te lo expliqué una vez. Si te agarran los huevos y te los estrujan, ¿qué sientes cuando te los sueltan? Placer. Prueba a que te los estrujen todos los días un poquito”, animó Frank al valenciano.

Pablo Motos entonces introdujo la vez que un animal le mordió “los huevos”, algo que jamás había contado. “Un murciélago, y fue en el Amazonas”, confirmaba Cuesta. “Me metí en un tronco que era como una cueva gigantesca, había un montón de bichos. Perdí los pantalones, me quedé encajado y un murciélagao me mordió los huevos, y a las tres semanas o así volvimos a Manao y me tuve que poner la vacuna de la rabia, tenía los huevos enrabiados”. Ese incidente le dejó los testículos muy inflamados, pues cuando le preguntaron por el aspecto reconoció que se sentía “orgulloso”. Por otro lado, Cuesta explicó que los antídotos de serpiente son “una especie de quimioterapia”, que dejan el sistema inmunológico sin defensas unos seis meses.

Al final de la charla, Frank Cuesta se exaltó al hablar de dos temas como la ley animal y la ley ELA. “La ley animal es una puta mierda”, afirmaba, e invitaba a los políticos a redactar una nueva con “la mayor asociación de veterinarios, ganaderos, criadores, de tiendas de animales, consumidores y gente con animales y te hacen la ley”. Describió la ley como “mascotista” y en la que no se tocan los toros o la caza, y que la gente que más protesta por estas dos cosas son de izquierdas como los partidos que la han sacado adelante. Sobre los toros, Cuesta dijo que no le gustan, pero que los respeta, y que puede comer con ganaderos. Algo que advirtió a “los de las redes sociales, que parecéis tontos”.

El invitado afirmó que en la actualidad “nos quejamos de todo, tenemos que ser veganos, feministas, no te puedo decir si esta taza es negra o blanca, tienes miedo”. Y apoyó a las tiendas de animales, que fue “nuestro primer zoo”, y que por la ley animal muchas “van a tener que cerrar porque un montón de inútiles quieren tener un galgo o un chihuahua para ponerle un jersey.

Entender de animales es saber lo que es un animal, y para los niños es muy importante”. Por último, cargó contra Ione Belarra y Pedro Sánchez, a los que llamó “mentirosos”, por no haber puesto en práctica la ley ELA, que Ciudadanos consiguió que se aprobase cuatro años atrás. “El tema de la Ley ELA es lo más vergonzoso, pueden haber sacado 4 huesos del mausoleo, pero prometerles y reirse en su cara les va a perseguir toda su vida”, finalizó, en referencia a la disolución de las cortes.