Provisional rezaba el subtítulo de aquella fórmula elegida por el PSOE recién llegado al Gobierno a principios del verano de 2018 para cambiar al presidente de RTVE, José Antonio Sánchez, para que, en un breve periodo de tiempo, se eligiera a un nuevo presidente de la Corporación.

Qué bien sonaba aquello de Administradora Única Provisional, aunque realmente trajera ciertas reminiscencias de aquel brillante "cese temporal de la convivencia" que empleó la Casa Real en 2007 para anunciar la separación de la Infanta Elena y Jaime de Maricharlar.

"Miren señorías, se lo digo a todos ustedes: yo vengo aquí a decir la verdad. Y cuando digo la verdad es la verdad. Y cuando digo que soy independiente, soy independiente. ¡Nadie me va a dar órdenes! ¡Ni ustedes, ni ustedes, ni ustedes! Esto quiero que lo tengan muy claro todos ustedes", decía muy gallita la Provisional Rosa María Mateo en el Senado demostrando que iba a pelear contra viento y marea por una nueva RTVE más plural, independiente y, sobre todo, arriesgada.

Le duró tan poco como el comunicado de la Casa Real. Llegaron las elecciones del 28A y no tardó ni un segundo en cumplir las órdenes que llegaron desde Moncloa: cambiar la fecha del debate televisado al día elegido por Atresmedia para que así Antena 3 tuviera que cancelar el suyo.

Aquello provocó una de las peores crisis de imagen de los últimos tiempos de RTVE, con los profesionales de la Corporación acudiendo a redes sociales a protestar por la bajada de pantalones de la Provisional. 

Dio igual. Ahí siguió. Difícil renunciar a los 10.405,02 euros brutos mensuales. Qué más da que la radiotelevisión pública haya caído a sus peores datos históricos de audiencia, que sus informativos estén lejos de liderar, o que la Corporación se convierta en arma arrojadiza entre partidos por anecdóticas polémicas, como la de ayer martes. Ahí sigue ella y todo su equipo. 

"Leonor se va de España, como su abuelo" fue el rótulo de la discordia en La Hora de La 1 que llevó a que el foco político se desviara por unas horas de Cataluña para centrarse en RTVE con PP, Ciudadanos y VOX pidiendo dimisiones, y Unidas Podemos defendiendo la libertad de expresión.

La Provisional estuvo veloz y en un comunicado urgente lamentaba "profundamente el grave error" y adoptaba medidas "inmediatas" para que los responsables de esta "equivocación" sean relevados de sus puestos. Es decir, a los más débiles. ¿Medidas inmediatas? ¿Responsables? Lo realmente inmediato y, no por este "error", sino por la deriva que ha tomado la Corporación en los últimos tiempos, sería su dimisión y la de todo su equipo.

No es de recibo que RTVE se haya convertido en el chiringuito de Enric Hernández, el verdadero Administrador en la sombra, quién ha nombrado y cesado en los últimos tiempos a su antojo para fortalecer el clan catalán y hacer de La 1 una mala copia de laSexta.

¿Saben quiénes están al mando de La hora de La 1? Lluís Guilera y Mónica López, dos profesionales procedentes de Cataluña. Al primero se le premió con el fallido, externalizado y polémico debate político La Pr1mera Pregunta. A la segunda, con las mañanas políticas.

¿Y saben quién es el director de informativos después de la dimisión de Begoña Alegría y el rechazo de Almudena Ariza? Pep Vilar, director de informativos en Cataluña entre 2004 y 2007 y consejero de TV3 a propuesta del PSC.

Por eso resulta descorazonador ver que un simple rótulo haya provocado más protesta política que determinados nombramientos, ceses o dimisiones -el de la directora de Magazines, por poner un ejemplo-, que en 2020 la radiotelevisión pública haya cerrado con mínimo histórico, o que la falta de un proyecto concreto esté llevando a RTVE a una muerte lenta y dolorosa.

En poco más de dos años y medio, la Provisional ha conseguido convertirse en la enemiga pública número uno de la izquierda y la derecha. De los primeros, por purgar a periodistas por el caso Leonor. De los segundos, por degradar las instituciones públicas. A mediados del pasado mayo, un lapsus provocó que Mateo se refiriese a la televisión de todos como 'Radio Televisión Espantosa'. Lo más triste es que así es.