Azcón, Feijóo, Abascal y Nolasco.

Azcón, Feijóo, Abascal y Nolasco. E. E.

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El 'reset' de Feijóo y Abascal por la sucesión de Mazón no alivia la tensión en Aragón: "Solo cambian por necesidad"

Los de Alejandro Nolasco aseguran que las conversaciones entre los líderes nacionales no alteran su postura sobre el presupuesto de 2026.

Más información: Las condiciones de Vox para investir al sustituto de Mazón: rechazo al Pacto Verde y a la "política migratoria de Sánchez".

Zaragoza
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El 'reseteo' de las relaciones entre Alberto Núñez Feijóo y Santiago Abascal para desbloquear la sucesión de Carlos Mazón al frente de la Comunidad Valenciana no rebajará la tensión en Aragón, donde la falta de acuerdo entre PP y Vox podría abocar a la Comunidad a un anticipo electoral.

El viaje del presidente, Jorge Azcón, a Virginia para aprender de su experiencia con los centros de datos ha puesto en pausa el debate sobre las cuentas de 2026. Pero conscientes de que el aleteo de una mariposa en Valencia o Extremadura puede provocar auténticos terremotos en otras partes del territorio, unos y otros no pierden ojo a lo que sucede en la comunidad vecina.

La primera llamada en mucho tiempo entre Feijóo y Abascal, marcada por la "cordialidad" y el "buen tono" entre ambos líderes políticos, parece apuntar al acuerdo.

El propio secretario general del PP, Miguel Tellado, confiaba esta semana en entenderse con Vox sobre la persona que relevará a Mazón -que en estos momentos sería Juanfran Pérez Llorca-, ya que, según dijo, a la Comunitat Valenciana "le conviene estabilidad" en vez de ir ahora a las urnas.

Todo esto, sin embargo, parece no haber movido ni un ápice las posiciones en Aragón. "Nuestro posicionamiento no cambia", aseguran desde Vox, que ve en el cambio de actitud del PP una simple cuestión "de necesidad" para resolver cuanto antes la sonada dimisión de Mazón.

Los populares dependen de Abascal para cerrarla, de ahí que ahora, en palabras de Vox, se muestren "más dóciles o sumisos". "Quien tiene criterios diferentes es el PP", afirman preguntados por el aparente acercamiento entre los líderes nacionales.

Esa es, en su opinión, la única forma de explicar que los populares "acepten o se vayan a comprometer en la Comunidad Valenciana con cuestiones que en Aragón califican de ilegalidad".

Vox asegura que no se está hablando de nombres concretas, sino de políticas, y ha puesto como condición que se siga adelante con las políticas verdes y de inmigración que ya se negociaron para investir al president en 2023 y, más tarde, para aprobar los presupuestos autonómicos de 2025. Es lo mismo que piden en Aragón, el rechazo a las puertas abiertas de Pedro Sánchez y al Pacto Verde Europeo, de ahí la 'extrañeza' de los de Nolasco.

Las relaciones llevan rotas desde que el PP exigiera el despido de un asesor de Vox por publicar mensajes racistas y fascistas en sus redes sociales. Vox lo calificó de "puñalada trapera", ya que, según su versión, Azcón "sabía" que se le iba a despedir y se anticipó al anuncio para "hurgar en la herida". Esto hizo que Nolasco anunciara que no se sentará a hablar del presupuesto de 2026 con los populares, aunque no aclaró cuál sería el sentido de su voto en caso de que se presenten unas cuentas acordes a sus reivindicaciones.

Esta misma semana, el propio consejero de Hacienda, Roberto Bermúdez de Castro, calificaba de "comentarios de barra de bar" algunas de las declaraciones de los diputados de Vox en Aragón, dejando claro que nada ha cambiado.

Lo hacía en una entrevista en el programa 'Buenos días Aragón' de Aragón Radio, donde reconocía que hacía meses que no hablaba con Alejandro Nolasco y que su relación con la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, era nula.

Todo parece apuntar a que la próxima semana, una vez que Azcón haya vuelto de su 'gira por las Américas', se empezarán a conocer datos y plazos concretos sobre el techo de gasto y el presupuesto de 2026. También podría formalizarse la convocatoria del Consejo de Política Fiscal y Financiera, a cuyo retraso se agarraban desde el Pignatelli para no llevar el techo a las Cortes.