Protesta frente al SAMA de los trabajadores de los centros de menores
Los trabajadores de los centros de menores irán a la huelga: "Quieren congelarnos el salario cuatro años más"
Los sindicatos van a impugnar en los tribunales los servicios mínimos que se han decretado, ya que consideran que son “abusivos”.
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Los trabajadores de los centros de menores de Aragón irán a la huelga después de no poder llegar a un acuerdo en el SAMA para el nuevo convenio colectivo. Los sindicatos y las empresas mantienen sus diferencias ante un acuerdo que afecta a 600 empleados.
Desde los sindicatos CGT, UGT y CCOO lamentan que la actitud de las empresas, entidades y patronales ha sido “infame e indigna” al no haberse presentado la mayoría de ellas a la mediación convocada.
A su juicio, la “imposibilidad” de conseguir mediante el diálogo el desbloqueo de las negociaciones les obliga a demostrar el “descontento” de las plantillas que llevan años con los salarios “prácticamente congelados”.
Además, los sindicatos van a impugnar en los tribunales los servicios mínimos que se han decretado, ya que consideran que son “abusivos” con la intención de impedir el derecho a huelga.
“Las empresas y patronales han fijado su objetivo en sus beneficios económicos a costa de los trabajadores. Lo que ha ocurrido en el SAMA al no presentarse las entidades, empresas y patronales es un desprecio absoluto a nuestro trabajo y a nuestras condiciones laborales. No queda ninguna duda de que lo único que les importa es su beneficio económico”, ha afirmado Héctor García, de CGT.
Mientras, los trabajadores están “al límite”, por lo que piden la mediación del Gobierno de Aragón para buscar una solución. “Se niegan a recibirnos. No parece que les importen los trabajadores del sector. Rechazan nuestras propuestas, no se presentan a la negociación y mediación de hoy, pero siguen teniendo importantes beneficios económicos. La huelga no tiene marcha atrás”, asegura Angélica Mazo, de UGT.
Desde CCOO tildan de “traición” a quienes sostenemos con nuestro esfuerzo un servicio esencial. “El Gobierno es cómplice por su pasividad ante nuestras reivindicaciones por mejorar nuestros derechos. No pueden tratar así a 600 familias, no pueden seguir sin incrementarnos los salarios”, ha subrayado Jesús Esteban, representante de este sindicato.