El pueblo gitano lleva seis siglos asentado en España. En la Comunidad Valenciana son aproximadamente 50.000 personas, 10.000 menos que hace una década, y representan el 7% del total del país (725.000) ya que sobre todo viven en Andalucía, donde superan el 34%, seguido de Cataluña y Madrid.    

Son una población con una identidad y cultura propia. Alicante ciudad, con entre 7.000 y 9.000 personas censadas, es el quinto municipio español con una mayor comunidad, eso sí, residente casi exclusivamente en pocos barrios de clase obrera. 

Y es que el pueblo gitano llegó a España de la mano de Juan de Egipto Menor, al que el 12 de enero de 1425 Alfonso V le concede una especie de salvoconducto aceptando de manera bienvenida a los gitanos y gitanas a España. Allí acabaron las simpatías porque, desde entonces, han sido discriminados en nuestro país. 

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Desde los Reyes Católicos, con la primera Pragmática Real antigitana aprobada en 1499, ley que les obligaba a cambiar su forma de vestir o abandonar su lengua bajo amenaza de expulsión o esclavitud; pasando por Fernando VI, que en 1749 protagonizó la “Gran Redada” para aprisionar a todos los gitanos y gitanas que hubiere en el país, de ambos sexos y cualquiera que fuera su edad, también en Alicante, como recordó el consistorio recientemente; sin olvidar la Ley de Vagos y Maleantes de 1933 o la presión de la dictadura franquista, con especial fijación contra las personas gitanas. O qué decir del reglamento de la Guardia Civil, cuerpo que aprobó artículos discriminatorios contra los gitanos que se mantuvieron hasta 1978.

Entonces había vuelto la democracia a España, pero no la discriminación real como marcan todos los indicadores sobre desigualdad, pobreza o delitos de odio. 

Bajo ese contexto, y con una población intermitente como se puede entender, existe una serie de apellidos vinculados a esta población por comunidades autónomas, de acuerdo con el estudio de “Los apellidos de los gitanos españoles en los censos de 1783-1785” elaborados a partir de la Real Pragmática, en el que es el principal documento sobre esta minoría de todo el Antiguo Régimen. 

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La lista de los 20 apellidos más populares dentro de la comunidad gitana en la Comunidad Valenciana por orden de frecuencia en la actualidad, de más a menos, son: 

Fernández, González, Hernández, Díaz, Gil, Cortés, Vicente, Escudero, Vargas, Montoya, Franco, Salazar, Bustamante, Barrull, Castellón, Malla, Leandro, Ximénez. 

En la provincia de Alicante

En base a esta selección, y atendiendo al último estudio del Instituto Nacional de Estadística con fecha de 2022, los apellidos de origen gitano quedarían así en base a su residencia en la provincia de Alicante. 

Fernández es el más recurrente, uno de los más repetidos en el país, y el primero de la lista en la provincia gracias a sus 21.766 personas que lo tiene como primer apellido y 21.559 como segundo, sin olvidar los 1.184 que posee el mismo por partida doble. 

González se encuentra a escasa distancia: 20.370 personas de la provincia se apellidan así en primer orden y 20.209 en segundo, además de 536 en ambos casos. 

De Hernández, prima más como segundo apellido en la provincia de Alicante en 14.092 personas frente a 13.963 como primero.  

Díaz es otro de los que más abunda, sobre todo como segundo apellido, 8.505 personas frente a 8.440 de primero. 

Gil también es frecuente gracias a sus 6.082 personas que lo poseen como primer apellido y 5.911 como segundo (105 repite ambos apellidos). 

Cortés es un apellido más oído como segundo, 5.016, que como primero, 5.003.

Vicente es bastante frecuente. 3.367 personas lo tienen como segundo apellido, 3.187 como primero y 33 como ambos. 

De Escudero encontramos 1.673 apellidos de primero y 1.575 de segundo en la provincia. 

De Vargas existen en Alicante 1.465 personas de primer apellido y 1.470 de segundo. 

De Montoya hay contabilizadas 1.217 personas como segundo apellido y 1.126 como primero. 

Franco está registrado para 1.011 casos como primer apellido y 970 como segundo, así como 12 en ambos. 

Salazar es otro apellido asociado a esta población. Como segundo apellido hay más, 974 personas y como primero 915.

Bustamante es poco común en Alicante donde 309 personas lo tienen como primer apellido y 281 como segundo. 

Barrull escasea en la provincia donde 492 personas lo tienen como primer apellido y 386 como segundo. 

De Castellón, únicamente existen 55 de primer apellido y 50 de segundo.

Malla solo cuenta con 21 personas como primer apellido y 16 como segundo. 

Leandro está a la cola con 12 apellidos de primer orden y 27 de segundo. 

Como curiosidad, no hay ningún apellido Ximénez registrado por el INE en la provincia de Alicante.