El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Elche (PSPV-PSOE y Compromís) ha acordado la protección parcial del viejo edificio del Mercado Central y su rehabilitación para convertirlo en un gran espacio dedicado al ocio, la restauración y la cultura, unido a la puesta en valor y musealización de los baños árabes y los refugios antiaéreos del entorno.
Así lo ha anunciado este lunes, en rueda de prensa, el alcalde del municipio ilicitano, el socialista Carlos González, con motivo de la reunión de la Junta Local de Gobierno y después de las recomendaciones de organismos dependientes de la Unesco, como el Icomos, que destacaba el valor patrimonial del antiguo mercado central y apostaba por su protección y conservación dada su singularidad cultural, urbanística e histórica.
De esa manera, el Gobierno local aparca el concurso de ideas que pretendía poner en marcha para decidir el uso del gran espacio donde actualmente se ubica el viejo edificio de abastos y propone la protección y rehabilitación del inmueble situado a pocos metros del Ayuntamiento de Elche.
La finalidad es mantener la estructura del edificio, menos la fachada que da a la casa consistorial, que se retranqueará varios metros para ofrecer espacio a los baños árabes. Así, la idea es convertir el antiguo inmueble en un gran espacio para restauración, ocio y cultura, con más de 1.000 metros cuadrados de superficie.
Un gran proyecto que irá unido a la rehabilitación y musealización de los baños árabes y los refugios antiaéreos del subsuelo, así como a la transformación del entorno, para que todos los elementos queden integrados.

Trámites urbanísticos

Desde el gobierno local ya se han iniciado los trámites para modificar el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y darle al suelo donde se sitúa el edificio un uso gastronómico. Al mismo tiempo, el alcalde aboga por trabajar en el pliego de condiciones para sacar a licitación el proyecto, tras el visto bueno desde el área de Patrimonio.
Según González, la actuación podría tener un coste total de cinco millones de euros, aunque todo dependerá de la redacción del proyecto. Para ello se apuesta por los recursos propios municipales o subvenciones de otras administraciones.
Por su parte, la portavoz de Compromís, Esther Díez, ha afirmado que este proyecto supone un "equilibrio" entre el respeto al patrimonio y el objetivo de hacer un entorno más accesible.
Díez también ha apuntado que, a nivel social, "encaja" con la pretensión de lograr un centro de la ciudad "abierto, humano y accesible".