La Federación de Comercio de la Pequeña y Mediana Empresa de la provincia de Alicante (Facpyme) ha pedido al Gobierno la creación de un bono eléctrico que permita a pymes y autónomos del sector "compensar el desmesurado incremento de la factura eléctrica que tienen que afrontar cada mes, que alcanza el 50 % y en algunos casos supera incluso el 60 %".

En un comunicado que recoge Efe, el presidente de Facpyme, Carlos Baño, insiste en la gravedad de la situación económica que atraviesan ya que el sector "está al límite". "Nuestros gastos fijos están aumentando de manera desorbitada por la subida del precio de la luz, además de por el transporte o las materias primas. Seguimos pagando los mismos impuestos y, cuando se aplica una rebaja del IVA de la luz, tres de cada cuatro negocios de nuestro sector se quedan fuera. Si no se pone coto, muchos comercios no van a poder superar la crisis", remarca.

Según fuentes de Facpyme, "hoy la luz alcanzará máximos cercanos a los 250 euros/MWh y nosotros hoy seguimos levantando la persiana, iluminando nuestras tiendas y también las calles, poniendo la calefacción para que nuestros locales sean confortables". Realizar todas esas acciones tiene un coste y, según sus cálculos, eso implica "que algunos negocios llegan a pagar por la luz más de cuatrocientos euros que hace un año".

Facpyme considera que, por ello, "la implantación de un bono eléctrico del comercio sería una buena medida". Y lo razonan por la importancia de "ayudar a un sector esencial en materia de empleo y estratégico para mantener la actividad económica en pueblos y ciudades, como ocurre también con la hostelería".

Vulnerables

Baño subraya que, además, los comercios de proximidad siguen asumiendo este aumento de los gastos fijos. De hecho, destacan que se trata de no repercutir esta subida en los precios que cobran a sus clientes, lo que, a su juicio, hace más necesaria aún la ayuda de las administraciones.

De ahí que reconozcan en ese comunicado que "también somos los sectores más vulnerables a los vaivenes provocados por la crisis". Un factor que suman a "las exigencias sanitarias y ahora también por el incremento de los costes".

"Ante situaciones excepcionales hacen falta medidas excepcionales y valientes", subraya Baño. El objetivo, añade, es "evitar que más empresarios tengan que bajar la persiana definitivamente, porque el drama de ver calles sin actividad y sin vida es algo que como sociedad no nos podemos permitir". Un punto en el que alerta también "del impacto que tiene sobre la economía y el empleo".