Con la victoria del pasado 18 de febrero, Ilia Topuria se ha convertido en el chico de oro de Alicante. El increíble triunfo por KO a Alexander Volkanovski en el segundo asalto de la pelea por el cinturón lo consagró como el campeón del mundo en el peso pluma de la UFC. 

La hazaña del hispano-georgiano ha dado la vuelta al planeta y lo coloca en el quinto puesto de la nueva clasificación de los mejores luchadores libra por libra. El derechazo que puso a su rival a dormir, invicto en su categoría y considerado una leyenda, le hace sumar una racha de 15 victorias y 0 derrotas como profesional que no hubiera sido posible sin las miles de horas de entrenamiento en el gimnasio Climent Club de Alicante.

Jorge Climent ya confirmó tres semanas antes del gran día a EL ESPAÑOL de Alicante que Topuria traería el cinturón a casa. Ahora, con el trabajo cumplido, vuelve a su centro de entrenamiento de la calle Burgos como si nada hubiera pasado para ponerse a trabajar en lo que considera "una fábrica de campeones".

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La gloria no ha cambiado las costumbres de los entrenadores de la nueva superestrella de las artes marciales mixtas. Tanto él como su hermano, Agustín Climent, se mueven por la zona en patinete eléctrico y saludan a sus deportistas en la puerta del gimnasio como si no acabaran de escribir historia del deporte.

"Vamos a estar felices hasta el día que nos muramos, lo digerimos poco a poco, pero no seremos conscientes del impacto que ha tenido hasta que pase el tiempo", señala Jorge, quien asegura que vivió el combate con la confianza que caracteriza a Topuria y a su equipo.

"No estoy sorprendido de lo que sucedió, en ningún momento tuve dudas, de hecho, pasó más tarde de lo que pensábamos, Volkanovski lo hizo mejor de lo que creíamos en el primer asalto, estaba convencido de que tenía que terminar así", añade.

Esa mentalidad ganadora es uno de los factores que ha hecho que miles de personas que no eran aficionadas a los deportes de contacto trasnocharan para ver la coronación del peleador. La diferencia entre un deportista exitoso y un referente es que "Topuria tiene los pies sobre la tierra y es muy buen ejemplo para los jóvenes. Visualiza y luego crea lo que imagina con unos actos que son buenos para seguir", comenta Agustín.

Jorge y Agustín a las puertas del Climent Club.

Aunque les separaban miles de kilómetros y una gran diferencia horaria el pasado domingo desde California, estaban en contacto con la ciudad a través de videos que les mandaban de las 2.500 personas que acudieron al Centro de Tecnificación para disfrutar del combate en la pantalla gigante instalada por el Ayuntamiento. Para Agustín, "fue un orgullo ver a Alicante apoyándonos, se nos llenaba el pecho de alegría al ver que todos compartíamos el mismo objetivo, era una sensación única". Además, Jorge agradece el trato del consistorio, si bien señala que antes de darse a conocer no lo tenían.

Climent Club, forja de gladiadores

Los hermanos argentinos llegaron a Alicante en el 2002, y en el 2008 crearon de la nada un lugar donde practicar MMA en una antigua carpintería. Poco tiempo después, Ilia y su hermano mayor, Aleksandre, comenzaron a entrenar con ellos, destacando sobre el resto por sus cualidades y aprendiendo rápidamente el jiu-jitsu brasileño de sus maestros.

El Climent Club se ha convertido en una especie de Meca de las artes marciales mixtas, acogiendo a peleadores de fuera de Alicante que quieren entrenar con los mejores. El sueño cumplido de su alumno más aventajado es una proyección de ellos mismo, ya que "en nuestra época no había competiciones, tuvimos que ser pioneros en crear los campeonatos y en este momento todo es más fácil", resalta Jorge.

Ganar el cinturón no es el único premio que se traen de Estados Unidos. La figura de Toupuria se ha convertido en un ídolo de masas que está haciendo que los gimnasios multipliquen sus inscripciones, un fenómeno que ven "con orgullo".

Poco antes de la charla, un joven preguntaba para apuntarse al Climent Club. Otro indica que está esperando a que salga su hermano pequeño, pero que gracias a la motivación que le ha dado el peleador alicantino se volverá a apuntar a boxeo después de haberlo dejado por un tiempo. "Fue increíble, lo tenemos en España y en Alicante, es una persona que transmite mucho, todos los gimnasios van a estar llenos después de ver a alguien español que ha podido llegar ahí de la nada", subraya el exdeportista.

En cuanto al futuro de la estrella, no tienen preferencias para su próximo combate, lo único que buscan es traer la UFC por primera vez a España. El siguiente paso es "seguir con la misma hambre, porque hemos escalado una montaña, pero después hay otra y después otra", sentencia Jorge Climent.