Enfrentamientos entre grupos armados causaron al menos una decena de muertos y otros tantos heridos en la última semana en la zona de la ciudad de Batangafo, en el norte de la República Centroafricana, informaron hoy medios locales.

Estos fallecimientos se produjeron cuando miembros de la milicia cristiana Antibalaka intentaron hacerse con posiciones del Movimiento Patriótico por la República Centrofricana (MPC) en una zona fronteriza con el Chad, provocando enfrentamientos violentos.

"Es una provocación de los Antibalaka, que no respetan los acuerdos de alto el fuego. Nos han atacado desde la semana pasada y nos estamos defendiendo para derrotarlos. Hay una decena de muertos; cinco de nuestros integrantes perdieron la vida", explicó Mahamat Alkhatim, el jefe del Estado Mayor del MPC.

También se registraron incendios de casas, y una decena de heridos fueron atendidos en un centro de Médicos Sin Fronteras (MSF).

"La situación en Batangafo y alrededores es muy tensa y la violencia puede aumentar en cualquier momento. La población local vive en la psicosis. Nos hablan de heridos que no se atreven a venir al hospital por miedo a ser atacados en el camino", lamentó Caroline Ducarme, jefa de la misión de MSF en la localidad, en un comunicado.

La República Centroafricana vive un complicado proceso de transición desde que en 2013 los rebeldes séléka derrocaran al presidente François Bozizé, lo que desató una ola de violencia sectaria entre musulmanes y cristianos que causó miles de muertos.

Los enfrentamientos armados han ocasionado una situación humanitaria preocupante en el país, que acaba de ser visitado por el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, quien instó al desarme de los grupos rebeldes para impulsar el proceso de paz.