Meritxell Batet, ministra de Política Territorial.

Meritxell Batet, ministra de Política Territorial. Efe

Política

El Gobierno, impotente al condicionar ERC los presupuestos a los presos: "No pueden pedirnos lo que no podemos hacer"

La ministra de Política Territorial, Meritxell Batet, ha señalado que la petición de ERC de que el Gobierno solicite a la Fiscalía que retire los cargos por el 1-O para apoyar los Presupuesto "es imposible".

15 octubre, 2018 02:21

La ministra de Política Territorial, Meritxell Batet, ha señalado en la noche del domingo que la petición de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) de que el Gobierno solicite a la Fiscalía que retire los cargos por el 1-O para apoyar los Presupuesto Generales "es imposible".

Batet, en declaraciones en el programa El Objetivo de LaSexta, ha subrayado que "en España existe la separación de poderes, y por tanto creo que el respeto a la independencia del Poder Judicial y de la Fiscalía son reglas básicas en un sistema democrático".

Y ha añadido: "los independentistas no nos pueden pedir cosas que saben perfectamente que no podemos hacer, si ellos quieren utilizar esto como pretextos para faltar a su responsabilidad esa es una decisión que tiene que tomar ellos".

"Tendrán que pensar -continuó- si sus votos son buenos para la ciudadanía y que van a paliar la desigualdad de nuestro país o por el contrario sus votos no sirven de nada".

Batet ha defendido los Presupuestos Generales acordados con Unidos Podemos y piensa que Bruselas los aceptará porque en ellos se apuesta en la política de gastos en abordar, profundizar y priorizar las políticas sociales, abandonados durante mucho tiempo, y por que cree que Europa tiene como objetivo la lucha contra la desigualdad y la pobreza.

Pero el Gobierno se ha mostrado impotente ante lo que parece ser un voto condicionado de ERC a que la Fiscalía rebaje los cargos a los políticos catalanes presos.

En relación a la polémica sobre los pitidos recibidos por el presidente Sánchez el pasado día 12, Batet ha indicado que en primer lugar los considera como "libertad de expresión, aunque preferiría que no se produjeran", y ha añadido que en cualquier caso "el Gobierno de España trabaja para los que nos pitaron"