Y los veinte poemas finalistas son:

MJVIZ
El rumor de la poesía suena / sombreada por acacias líquidas / y conversaciones extasiadas sobre el césped.

Marta
La memoria del árbol es quebradiza. / Luces y sombras orillan su tronco / en el desliz, suave, de la corteza de los días

ANA
Intuyo / lo presiento / que en lo oscuro de tu sombra aparecerás vestida con el viento.

MCPavón
Espantan los mirlos bajo el sauce /mientras una lluvia de estrellas/ hermosea la belleza entre las ramas.

PilarAlejos
Un aliento de libélulas crepita / en un atardecer de amapolas. / Su gélida llama tiñe de sombras los girasoles.

Olanna
En mañanas luminosas, bajo la compacta foresta, / el confundido reloj biológico / activa el instinto de la lechuza depredadora.

Hwnvi
Voy a remontar el cielo donde germinan los cipreses / soñando clavarse delante de la araña que baila / sobre la sombra, postrada ante tu ausencia.

JiV
Me gusta ese nuevo look de tu sombra / Siempre está de humor, como la mariposa / Es un suspiro que acaricia la sustancia más suplicante del mundo.

Laneto
Bajo la endrina sombra de la parra/ acurrucado el cuerpo de un recuerdo/ le germina la luz que me abandona.

Entelequio
Bailamos con las sombras / evitamos las tentaciones del dios sol / soñamos con convertirnos en sultanes momificados. 

Ayalgamar
Cuando madure el torso del cielo,/ catedral de la honesta luz del mediodía,/ acudiremos a la solitaria lucidez de la sombra.

Luz
Un sol verde estalla en la parra, / la luz avanza, retrocede, / y en el baile de nuestros cuerpos llamea la sombra.

Thurma
Después del exilio de los cuerpos/me detengo a la orilla de tu aliento/bajo la sábana oscura del encuentro

Faradays
En mi piel translúcida/ se dibujan las sombras/ del viejo ciprés.

Camomila
En las sombras se adivinan palabras/ siluetas ocultas en abrazos/con el alma bailando sus anhelos.

Rumor
Cómo cúpula nuestra verde higuera // haces insolentes se entrometen entre las brevas // iluminando inocentes besos de estío.

Dora
Volveremos al paraíso aquel de los manzanos / y crecerá en el hueco de la siesta / una dicha febril llena de infancia

Zoe
Bajo los tilos, / el perfume dulce de la infancia, / meciéndose en mi memoria.

Marguerite
El viento danza con su dulce esencia/ y en cada instante que el reloj gobierna/ se oculta el canto del camaleón.

Charles
Y vuelven a llevarnos todos los caminos a la umbría hospitalaria. / Allí, donde un día, hicimos arder / las naranjas de la noche.

Tema de la semana que viene: “Planetas interiores”.