Ford Motor Company ha trasladado este viernes malas noticias a la planta española de Almussafes. Según ha alertado UGT, el sindicato mayoritario de la factoría, el director de Operaciones, Kumar Galhotra, les ha informado de que estudian aplazar las inversiones prometidas. La firma se comprometió en 2022 a producir en la localidad valenciana dos de sus nuevos coches eléctricos.

Según ha subrayado UGT en un comunicado dirigido a sus afiliados, Ford está estudiando un "cambio de paso" y "aplazar cualquier decisión que tenga que ver con inversiones" para la electrificación de la fábrica. El escrito ha sido difundido tras el encuentro de los representantes sindicales con Galhotra, que ha estado en Almussafes jueves y viernes de esta semana.

Preguntadas al respecto por EL ESPAÑOL, fuentes de Ford España se han remitido a las declaraciones que vienen realizando desde hace semanas. "A medida que el mercado y nuestros clientes hagan la transición a los vehículos eléctricos, equilibraremos el volumen con la demanda", han explicado.

[La planta de Ford Almussafes reducirá su producción en 23.300 vehículos menos este año]

UGT ha advertido de que "este nuevo posicionamiento por parte de la compañía supone una alteración de lo inicialmente establecido y acordado" y sitúa a la plantilla tanto de Valencia como del conjunto de Ford Europa "en el alambre". "Esperamos concreción en un tiempo breve por parte de la dirección mundial de Ford ante este cambio de paso", ha señalado.

Mientras Ford, en Detroit, "revalúa" las posibilidades de electrificación para Almussafes, el sindicato ha reclamado que la empresa "debe garantizar carga de trabajo suficiente para mantener la plantilla, inicialmente prevista en los planes por la electrificación". En ese sentido, ha planteado que se potencie la fabricación de vehículos híbridos.

UGT ha subrayado que su posición negociadora permanecerá "inalterable" mientras "no quede despejada esa incógnita", "quede comprometida esa carga de trabajo", que cifra en alrededor de 200.000 coches al año", y se permita "la transición a la electrificación sin más sobresaltos".

Además, ha indicado que la compañía "tendrá que garantizar una fecha de revisión del Plan de Electrificación durante ese proceso de transición que ahora se alarga". "En caso contrario, la empresa no podrá pretender negociar más medidas de flexibilidad, al menos con la UGT", ha insistido.

En este marco, UGT y la dirección se han emplazado a volver a reunirse en diciembre. El sindicato ha remarcado que "la pelota está en el campo de la empresa y, a pesar de la complejidad del momento, debe haber claridad y determinación por su parte".

"Ofrecer soluciones"

De ser así, UGT ha asegurado que estará dispuesto a "ofrecer soluciones", "si es que realmente Ford quiere continuar con esa apuesta de futuro y no continuar durante más tiempo instalados la indecisión".

"El futuro de Ford Europa está en cuestión, y así se pondrá en evidencia esta próxima semana desde Colonia (Alemania), a través de las primeras movilizaciones que se van a llevar a cabo" en esta ciudad, ha explicado el sindicato, que insta a la firma del óvalo a dar "respuestas" porque en Valencia la compañía "tiene un acuerdo" con UGT que cumplir.

El año pasado se anunció que la fábrica de Almussafes era la elegida por Ford para producir su nueva plataforma de vehículos eléctricos a partir de 2025, una decisión que aseguraba la carga de trabajo en los próximos años, pero no evitó que se tuviera que redimensionar la plantilla con un ERE que ha afectado a 1.124 trabajadores. Por otro lado, en las últimas semanas, debido a la reducción de ventas, la fábrica de Almussafes está aplicando jornadas industriales para detener la producción.

En vistas a la electrificación, el Ministerio de Industria aprobó la solicitud de Ford para la línea de baterías de la segunda convocatoria del Perte VEC, con 37,6 millones de euros, y la empresa también ha solicitado las ayudas dirigidas a la cadena de valor del vehículo eléctrico.