Comisión de la dana en el Senado.
El exjefe de los Policías del Agua de la CHJ asegura que durante el día de la dana "no pidieron ayuda desde el SAIH"
Ricardo Domínguez ha señalado en la Comisión de Investigación del Senado que "no fue una avenida, fue un tsunami".
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El que era jefe del Servicio de Policía de Aguas y Cauces Públicos de la Confederación Hidrográfica del Júcar en la dana del 29 de octubre, Ricardo Domínguez, ha destacado este lunes que el día de la tragedia "no pidieron ayuda desde el SAIH".
"Yo estaba sorprendido con los números que estaban saliendo", ha subrayado. De hecho, ha asegurado que "le preguntaba a la comisaria si eran normales esos números".
"No fue una avenida, sino un tsunami". Así lo ha señalado este lunes ante la Comisión de Investigación de la dana en el Senado.
Sobre la riada, ha apuntado que fue "complicada de gestionar" y con "caudales que multiplicaron por diez" las cifras habituales que gestionan las presas y los barrancos. "Cualquier cosa que se hubiera hecho casi habría dado igual", ha añadido.
Domínguez ha recordado la diferencia entre los valores normales y los que sufrieron presas como la de Forata, donde la primera información que recibió es que iban a desembalsar 1.000 metros cúbicos por segundo, cuando se suele comenzar a complicar la situación con 100.
También se ha mostrado sorprendido por las cifras del Barranco del Poyo, donde se llegó a desembalsar alrededor de 1.700 metros cúbicos por segundo, diez veces más de lo habitual, que serían 150 o 200.
Así, ese exceso de agua se desbordó alcanzando a poblaciones en las que no había caído ni una gota de agua, haciendo "complicada de gestionar" la catástrofe.
"La Ley de Aguas no distingue entre barrancos y ríos, son todo cauces y son competencia de la CHJ", ha explicado. Y también ha recordado las diferencias con unos años atrás: "En el 2015 existía un técnico de guardia, y ahora en 2024 no".
En su intervención, Domínguez ha reiterado varias veces que las cuestiones debatidas sobre los efectos de la dana en la población “nada tienen que ver” con las funciones de su servicio, por lo que no ha podido dar respuesta a gran parte de las preguntas de los senadores.
Ha recordado que las tareas de su servicio se limitan a la inspección, control y vigilancia del dominio público hidráulico, lejos de las de emergencias o protección civil.
"Nuestro trabajo principal viene después de las lluvias", ha explicado, a través de la elaboración de informes sobre los daños que estas avenidas han producido en los cauces. Y añade: "No había agentes medioambientales, no había técnico de guardia, y el caudal no paraba de subir".
Por ello, aunque con conocimiento de la situación de los caudales a lo largo del día de la dana, la misma información que recibían también otros organismos, ha reiterado que la obligación de su servicio no era "la de informar".
Entre las lecciones que deja la tragedia, en respuesta al senador de Vox Fernando Carbonell, ha expresado que "las cuestiones técnicas deben dejarse en manos de los técnicos".
Por su parte, los senadores por el Grupo de Izquierda Confederal, Enric Morera, y por el Grupo Socialista, José Manuel de la Vega, repitieron las críticas que ha sufrido esta comisión de investigación desde su creación al considerar que no cuenta con los “verdaderos responsables de la emergencia”, entre ellos, miembros del Gobierno valenciano.