Playa de Port Saplaya en una imagen de archivo. Turisme CV

Playa de Port Saplaya en una imagen de archivo. Turisme CV

Valencia PLAYAS

Cierra la playa de Port Saplaya en Valencia por contaminación residual: su origen apunta a la red de alcantarillado

Los análisis realizados este viernes determinarán si se puede permitir el baño durante el fin de semana.

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Valencia
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La playa de Port Saplaya, situada en el término municipal de Alboraya, permanece cerrada al baño por una contaminación residual. Aunque todavía no se conoce la causa, todo apunta a la red de alcantarillado de la zona.

La Conselleria de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio ha comunicado este viernes al Ayuntamiento de Alboraya, en Valencia, el cierre de esta playa, según han confirmado fuentes autonómicas y municipales.

Esta contaminación ha sido detectada en una analítica del agua. Desde la Conselleria de Medio Ambiente se toman muestras en 300 zonas de baño de la Comunitat para, precisamente, detectar estos problemas.

En el caso de Port Saplaya, se investiga el origen de un posible vertido, que podría venir de la red del alcantarillado o de las acequias cercanas. Esto podría haber sido provocado, a su vez, por las lluvias de las últimas horas, según han precisado fuentes autonómicas.

Desde el Ayuntamiento del municipio han comunicado que se han detectado niveles elevados en los parámetros microbiológicos.

Así, este viernes se han realizado más análisis para proceder este sábado a la reapertura o continuar con su cierre, en función de los resultados.

El consistorio ha activado el protocolo correspondiente, informando al Servicio de Socorrismo y Salvamento Marítimo, a la Policía Local de Alboraya y a la ciudadanía sobre este asunto.

No es la primera playa de la provincia de Valencia que se cierra este verano. Quince días atrás ocurría lo mismo en las de El Perelló, les Palmeres y Motilla, situadas en el término municipal de Sueca.

Allí se detectaron niveles elevados en los parámetros microbiológicos de calidad del agua, algo que se debió a un origen residual.

Durante el mes de julio también se prohibió el baño en los tramos de playa de La Goleta (Tavernes de la Valldigna), Xeraco y Daimús por contaminación fecal, tras detectarse niveles de enterococos intestinales que duplicaban los límites permitidos.

En todos los casos, la bandera roja se mantuvo hasta que los nuevos análisis confirmaron la recuperación de los parámetros sanitarios.