La ministra de Hacienda, María Jesús Montero y la consellera de Hacienda, Ruth Merino, antes de la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) en Madrid. Efe / Marisca
La Generalitat Valenciana estima que la quita de la deuda solo le supondrá un ahorro de 165 millones en intereses
El Gobierno valenciano considera que "la ligera reducción del déficit no permitiría disponer de más recursos para gastar en servicios públicos".
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La Comunitat Valenciana es la región peor financiada desde que caducó el actual sistema de reparto, en 2014. Con la propuesta del Gobierno de Pedro Sánchez obtendría la condonación de deuda más baja en términos relativos. Se trata de un 19% -11.210 millones- sobre el total de su deuda de 59.000 millones.
Sin embargo, tras el pacto del Gobierno con ERC el pasado lunes, la Generalitat Valenciana estima que la quita de la deuda "en nada beneficia" a la región y solo le supondrá un ahorro de 165 millones en intereses.
El presidente de ERC, Oriol Junqueras, anunció el pasado lunes un acuerdo con el Ejecutivo para la condonación de un 22% de la deuda de la Generalitat de Cataluña con el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), lo que equivale a 17.104 millones de euros, 2.000 más de lo acordado.
Al respecto, el Gobierno valenciano considera que la condonación "no permitiría a la Generalitat disponer de más recursos para gastar en servicios públicos como Sanidad, Educación o Servicios Sociales". "Y, desde luego, tampoco facilitaría en nada la reconstrucción tras la dana", añade.
Por tanto, el "único efecto" para la Generalitat -según traslada- de la condonación propuesta por el Gobierno "sería un ahorro en intereses de alrededor de 165 millones al año", que traducen en "una ligera reducción del déficit".
Asimismo, el Consell afirma que los 165 millones de ahorro anual tampoco podrían destinarse a gasto social, tal y como confirmó la AIReF al desmentir las afirmaciones del Ejecutivo central.
Así, el beneficio para los valencianos es "nulo", ya que a juicio de la Generalitat, "en ningún caso redunda en una mejora de los servicios públicos".
"Y, por supuesto, como españoles tendrían que asumir la parte proporcional de la deuda condonada por el Estado al conjunto de las CCAA", indican desde la Conselleria de Hacienda.
El anuncio por parte de Montero de quita de la deuda llega en medio de la reconstrucción tras la dana, cuando más recursos requiere la autonomía. El grueso de la abultada deuda valenciana la ha provocado, precisamente, la infrafinanciación que padece por parte del Estado.
En concreto, el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (Ivie), atribuyó en 2022 el 80% de la deuda contraída a la infrafinanciación que sufre la comunidad autónoma.
Ahorro en intereses
Del impacto que supondría esta reducción del déficit, la Generalitat destaca que el ahorro anual en intereses "es menor a lo que se deja de recibir cada mes por la no actualización de las entregas a cuenta"; una cantidad que asciende a los 200 millones mensuales.
En términos porcentuales, los 165 millones de ahorro solo equivalen al 14% de lo que la Generalitat debe pagar solo este año en intereses: 1.183 millones.
A esto se suma, además, que la condonación propuesta por el Gobierno para la Comunitat Valenciana -11.210 millones- "parte de un defecto original", aseveran, pues "está basada en un cálculo a la medida de los independentistas catalanes, cuya solvencia técnica ha sido puesta en cuestión por los expertos de la comisión Consell-Corts y Fedea".
La condonación, por lo tanto, no compensa la deuda derivada de la infrafinanciación, que es el origen del 80% de la deuda acumulada por la Generalitat.
El Gobierno valenciano sostiene que la cantidad ofrecida por el Gobierno de España equivale a uno de cada cinco euros de la deuda valenciana total (57.996 millones) y a uno de cada cuatro euros de la deuda valenciana justificada por el mal funcionamiento del SFA (46.099 millones),
"Estos dos porcentajes son los más bajos que se ofrecen a cualquiera de las otras comunidades", señalan.
Desde 2018 el Ejecutivo central ha sido incapaz de cambiar el modelo de financiación ni, como solución transitoria, compensar por la falta de recursos a las cuatro regiones maltratadas, entre las que también se encuentran Murcia, Andalucía y Castilla-La Mancha.
Pese a las circunstancias, el porcentaje de quita propuesto para la Comunitat se sitúa a la cola en términos relativos.
