Puente colgante de Arouca, en Portugal.
El megapuente colgante a un paso de Galicia: 516 metros de longitud y 175 de altura sobre el abismo
Este increíble puente colgante tiene el suelo de rejilla, lo que permite ver el vacío bajo tus pies
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Galicia destaca por muchos motivos, ya sea por sus paisajes, historia, cultura o gastronomía. No obstante, otro aspecto muy relevante de la comunidad es su cercanía al país luso, lo que nos permite disfrutar, a pocos kilómetros de distancia, de todo lo que ofrece una sociedad diferente a la nuestra.
En este contexto, destaca un puente colgante que se encuentra en Portugal, muy cerca de Galicia, que llegó a ser el más largo del mundo tras su inauguración en 2021. Ya no ostenta este reconocimiento, sino que es el puente sobre el Gran Cañón de Huajiang, en China, el de mayor longitud con 2,89 kilómetros. Sin embargo, merece una visita porque es espectacular.
516 metros de longitud
Así es Arouca 516
Muy cerca de Galicia, al norte de Portugal, se encuentra una de las construcciones más espectaculares de Europa: el puente colgante Arouca 516, también conocido como Ponte Suspensa, una pasarela que parece suspendida en el aire y que ofrece una experiencia tan impactante como inolvidable.
Situado en el Geoparque de Arouca, dentro del distrito de Aveiro, este puente peatonal se extiende nada menos que 516 metros de largo y se eleva 175 metros sobre el río Paiva.
Si no sufres de vértigo y te atreves a cruzarlo, el puente te regala unas vistas espectaculares de la Garganta do Paiva y la Cascata das Aguieiras, dos enclaves naturales incluidos en la red de geositios del Geoparque de Arouca reconocidos por la UNESCO.
Ponte Arouca 516
El Arouca 516 fue inaugurado en mayo de 2021, tras varios años de diseño e ingeniería liderados por el Instituto Itecons de Coimbra. Su estructura, completamente metálica, conecta las orillas del río Paiva. Está formada por módulos unidos entre sí mediante una red rígida y barandillas de acero.
El suelo, hecho de rejilla, permite ver el vacío bajo tus pies, lo que aumenta la sensación de estar caminando literalmente entre montañas y nubes. Por este motivo, no es una experiencia recomendable para quienes sufren vértigo, pero sí un sueño cumplido para los amantes de las aventuras y la naturaleza.
Este puente desbancó en su momento al Charles Kuonen Bridge, en Suiza, como el más largo del mundo, y aunque ya no dispone de este reconocimiento, el Arouca 516 sigue siendo una de las joyas más impresionantes del turismo portugués.
De hecho, fue galardonado con el premio a la Mejor Atracción de Desarrollo Turístico de Europa por los World Travel Awards, un reconocimiento que subraya tanto su valor arquitectónico como su impacto en el desarrollo sostenible de la región.
Ponte Arouca 516 o Ponte Suspensa
El entorno no podía ser más espectacular. El puente se integra en el paisaje montañoso formado por las sierras de Freita, Montemuro y Arada, un territorio ideal para practicar senderismo, escalada o barranquismo. Muy cerca se encuentran los Passadiçós do Paiva, una pasarela de madera de ocho kilómetros junto al río que permite disfrutar de la belleza del valle.
Si te atreves a atravesar este puente, debes reservar tu entrada previamente. El precio de entrada para los adultos es de 12 euros (entre 18 y 65 años); para los niños, entre 6 y 9, los jóvenes, entre 10 y 17, y los mayores de 65, el precio es de 10 euros.
No pierdas la oportunidad de hacer esta caminata inolvidable entre el cielo y la tierra.