Irán no quiere que la gente baile y los iraníes le dan dos tazas

Maed Hojabri es una joven iraní de 18 años que ha sido detenida este viernes por bailar sin velo, de uso obligatorio en su país, y subir un vídeo a su cuenta de Instagram. Las autoridades le obligaron a salir por televisión confesando su "mal" comportamiento y pidiendo perdón después de cerrarle el perfil en la red social, pero lejos de silenciar su historia y señalarla como culpable han provocado que personas de todo el mundo se hayan solidarizado con ella.

Con 600.000 seguidores en la red social, la joven habría se habría saltado el precepto de hacer público un gesto ilícito, como bailar y llevar velo, que estaba realizando en lo que parece su casa. No es la única detenida por ello, otros usuarios iraníes han corrido la misma suerte, pero su caso ha sido el que más impacto ha generado y las redes no han tardado en llenarse de respaldos en forma de vídeos y bailes.

Algunos han optado por ocultar sus rostros y esquivar así a las autoridades mientras, pero otros han ido un paso más allá y han bailado con ropa corta y bebidas en la mano, desafiando la normativa religiosa. "Dejad que sean libres. Dejad que la gente viva a gusto" o "estáis robando la adolescencia y la juventud, por la libertad y por la alegría, yo bailo" son algunos de los mensajes que acompañan a las imágenes.

Un 30 % de los iraníes usa Instagram, una red social que todavía no está censurada en el país, como sí lo están Facebook y Twitter, pero que tampoco se libra de la censura y el rastreo de las autoridades en busca de contenido que vulnere las leyes iraníes basadas en preceptos religiosos.

En los últimos años ha habido varias detenciones y castigos a usuarios de la red social por sus posados. De hecho, en 2014 un grupo de amigos recibió latigazos por grabarse bailando Happy, de Pharrel Williams, en Teherán.